El caso de paternidad de Julio Iglesias llega a Estrasburgo

Javier Sánchez Santos no se rinde. Quiere a toda costa que la Justicia le declare hijo de Julio Iglesias como así le avala la prueba de ADN al constatar una compatibilidad genética del 99 por ciento.

Aunque por el momento, el Tribunal Constitucional se reitera en que es cosa juzgada, Sánchez no pierde la esperanza. De ahí que haya decidido, junto a su afamado abogado Fernando Osuna, llevar el caso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH). Sánchez está convencido de que conseguirá ganar en Estrasburgo por las muchas sentencias que lo amparan y porque es favorable a la verdad científica por encima de cuestiones procesales.

Después de tres décadas de lucha bien se lo merece. Cuando apenas tenía 13 años, su madre, la bailarina portuguesa María Edite Santos , interpuso la demanda civil de paternidad. No fue nada fácil ni para ella ni para él. En su caso tuvo que enfrentarse al acoso escolar y dos cambios de instituto que le hicieron abandonar los estudios, como bien explicó en una entrevista con ABC. Ahora, hecho un hombre, es él quien lucha en los tribunales por llevar el apellido del cantante, aunque sin esperanzas ni ganas de conocerle.