Ivannia Salazar

Ivannia Salazar

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La 'Great Paul' es la campana de iglesia más grande del Reino Unido. Con 16 toneladas de peso, este viernes su sonido se escucha en los alrededores de la Catedral de San Pablo en Londres, donde esta mañana se celebró el servicio de acción de gracias por los 70 años de reinado de Isabel II, en el segundo día de celebraciones oficiales por el Jubileo de Platino . Durante cuatro horas después del servicio, la campaña tañirá sin pausa, en su primera ocasión real desde que se restaurara el año pasado. Y es que el mecanismo de la campana, que data de 1882, se rompió en los años 70, lo que la mantuvo en silencio durante décadas hasta su reparación en el 2021. Desde entonces solo ha sonado ocho veces. Su historia es tan curiosa, que incluso el autor Trevor S. Jennings escribió un libro sobre esta creación hecha en bronce y para cuya fundición fue necesario construir un horno gigantesco . Para que suene, se necesitan dos personas, que forman parte del gremio de campaneros, y que tienen que enrollar la cuerda en torno a su cuerpo.

Pero esto no es el único sonido escuchado este viernes cerca de la Catedral, a la que la monarca finalmente no acudió, una decisión difícil ya que para Isabel II su fe es muy importante y es además ella la cabeza de la Iglesia de Inglaterra. Los abucheos también fueron parte de la celebración y la multitud los coreó en dos ocasiones: cuando llegaron Harry y Meghan, para quienes en todo caso también hubo gritos de apoyo; y para el primer ministro Boris Johnson y su esposa, Carrie, que sufrieron un abucheo atronador mientras subían las escaleras del templo.

Otro detalle curioso es que las cámaras no mostraron un momento muy esperado: el saludo entre los hermanos Harry y Guillermo, cuya relación se deterioró mucho con el abandono de los duques de Sussex de su labor como miembros de la familia real y tras la polémica entrevista que la pareja concedió a la presentadora estadounidense Oprah Winfrey , y en la que los Windsor no salieron bien parados. Y aunque la reina, a sus 96 años y una vez superados los meses difíciles de la pandemia, los escándalos de los Sussex y del príncipe Andrés y la muerte de su marido Felipe de Edimburgo parece estar dispuesta a que la relación mejore, lo cierto es que el público espera un encuentro público entre los hermanos que termine de confirmar que tras la tormenta, llegó la calma.

Por otro lado, aunque la ceremonia religiosa oficial fue la de la Catedral de San Pablo, a lo largo y ancho del país se celebraron también servicios religiosos y encuentros de oración por la monarca, incluso entre otras denominaciones religiosas, como la comunidad musulmana.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación