Anabel Pantoja pierde los nervios y pone en peligro su boda

Estos días deberían ser todo felicidad para Anebel Pantoja , inmersa en los últimos preparativos de su boda con Omar Sánchez y de despedida en despedida de soltera. Sin ir más lejos, la sobrina de Isabel Pantoja fue sorprendida este domingo por su círculo familiar. Aterrizaba en Sevilla sin saber su destino final. A ciegas y llevada por su madre hasta un autobús donde le esperaban sus amigos y su prima Isa, además de Raquel Bollo, en el Parque Nacional de Doñana en Huelva. Días atrás se reunía con amigas en un local chill-out al aire libre en Maspalomas.

Pero no todo es alegría para la televisiva, más bien todo lo contrario. Su enlace, que tendrá lugar el próximo 1 de octubre, no para de generar polémica tras polémica. Primero fue un grupo de ecologistas el que puso pegas porque el enlace se celebre en la playa de La Graciosa en Canarias; después llegaron las quejas de varios rostros conocidos de Telecinco al no ser invitados al gran día y ahora la controversia se cierne en torno a la ausencia de su padre, Bernardo Pantoja , el día de su boda. Unos audios comprometidos demostrarían que su progenitor estaría intentando pactar un reportaje fotográfico a espaldas de su hija como condición para acudir.

No es extraño que con todo esto y a escasos 15 días de su gran día, los nervios empiecen a aflorar en Anabel Pantoja, quien ha terminado por estallar este martes contra un grupo de periodistas. De muy malos modos y con aspavientos , Anabel Pantoja ha mostrado su peor cara.

«Me puedes dejar tranquila, por favor», ha empezado diciendo la sobrinísima. Y proseguía espetando muy enfadada con un reportero: «No te voy a responder a nada». Anabel Pantoja no quiso aclarar nada sobre la supuesta traición de su padre ni sobre el resto de polémicas.

La otra gran ausente de su boda, además de su padre, es su tía Isabel Pantoja. La tonadillera ha preferido no dar la cara y ausentarse en este día tan importante para la que es como su hija. La razón sin duda es la presencia de Kiko Rivera en ella. Madre e hijo no están dispuestos a hacer las paces y Pantoja, que es mucha Pantoja, prefiere no tener que verle la cara al que considera un traidor después de dejarla como una ladrona en televisión.