Especial másteres

Respuestas eficaces a las incógnitas del mercado de trabajo

Son muchas las cosas que aporta la formación de posgrado y que aprecian las empresas a la hora de seleccionar a los aspirantes

Belén Rodrigo

En un mercado de trabajo cambiante y cada vez más exigente, el máster se presenta como un elemento diferenciador del candidato . Son muchas las cosas que aporta la formación de posgrado y que aprecian las empresas a la hora de seleccionar a los aspirantes. No se trata de tener un título más en el currículo, sino que ofrece otro tipo de formación . «Un máster aporta conocimiento y desarrollo personal, que es difícil de cuantificar, y genera ‘networking’», indica Fernando Calvo , People & Culture Director en HAYS. Cuando se acaba la carrera los alumnos tienen una formación muy generalista. «El máster, acompañado por las prácticas, supone que en poco más de un año el candidato cuenta ya con experiencia y ha orientado más su carrera profesional», añade.

Hay que diferenciar entre un máster habilitante y un no habilitante, que a su vez puede ser un título oficial o un título propio. El habilitante se refiere a aquella formación superior necesaria para ejercer una carrera . Entre estas profesiones reguladas se encuentra la de abogado o arquitecto. Entre los no habilitantes, los másteres oficiales pueden tener una orientación de investigación, que da acceso al Doctorado y con salida profesional investigadora, pero también profesionalizante, orientada más a la inserción laboral del alumno, que además suelen contar con prácticas obligatorias. Por su parte, «los títulos propios actualizan rápidamente su contenido y no son oficiales, es decir, no han sido aprobados por el Ministerio de Educación. Están orientados a adquirir un conocimiento rápido, actualizado y orientado a la aplicación profesional directa», subraya el departamento de Orientación de la Universidad Camilo José Cela.

Fernando Guijarro , managing director de Talent Consulting de la consultora de Recursos Humanos Morgan Philips, recuerda que «el aprendizaje es la clave». Cuando hablamos de estudios de postgrado, puede haber varios escenarios. «Uno de ellos es cuando se quiere consolidar el conocimiento en un área concreta, pasar de generalista a especialista y eso te posiciona en el mercado de trabajo. Pasas del estudio al mundo profesional », resalta. «Supone un contacto con los profesionales, además de adquirir conocimientos. Trabajas unas habilidades diferentes y hay una puesta en escena. Conozco los contenidos y tengo criterio para aplicarlos», añade. Un segundo escenario sería aquel en el que el estudiante quiere reenfocar su trayectoria , «y ese cambio interno es un plus, supone un crecimiento acelerado» . El estudio del máster puede estar también motivado por un cambio de área, «lo cual nunca es fácil», matiza Guijarro.

En la recta final

Si bien muchos reclutadores aseguran que el máster no es un factor determinante a la hora de seleccionar al candidato, sí hay más consenso al admitir que por lo general te ayuda a estar en la ‘short list’ de candidatos . Tal y como resalta Fernando Calvo, «con el máster desarrollas una forma de pensar. Trabajas con personas de otras compañías, te vas a trasladar a una forma de pensar de una empresa. El reclutador sabe que si ha hecho un determinado programa tiene un mínimo nivel porque hay escuelas que seleccionan a sus alumnos». Según el máster y la escuela o universidad donde se haya llevado a cabo, «se ofrecen más detalles del candidato», puntualiza.

Ya de por sí haber hecho un máster «permite entender que la persona tiene un conocimiento más profundo de algo y si ha sido en el extranjero te da también señal que controla idiomas». Fernando Guijarro señala también que muchas veces la primera selección de los candidatos puede hacerse con una máquina y contar con un máster puede permitir pasar ese primer filtro . «En algunos casos es un requisito deseable y en otros casos es imperativo», concluye.

Miguel Sarrión , director asociado en Peoplematters, considera que tradicionalmente en España las titulaciones universitarias han estado desconectadas de la realidad empresarial y los másteres proporcionaban «formación y habilidades clave para la transición al mercado laboral». No obstante, este ‘gap’ se viene reduciendo «con las aportaciones de las universidades privadas y las propias mejoras en la universidad pública». Llama la atención el hecho de que «otras alternativas o complementos al máster empiezan a tener cada vez más influencia en el mercado laboral, como las acreditaciones en temas específicos o las certificaciones profesionales ». Además, hay que tener en cuenta que «hay una gran diferencia de calidad en el mercado y ciertas instituciones son una garantía para las empresas que reclutan».

Al hablar de los perfiles más digitales, Sylvia Taudien , CEO y Fundadora de Advantage Consultores, señala que las generaciones jóvenes tienen buenos conocimientos de uso de dispositivos digitales. «Sus competencias digitales como la creatividad, la adaptación a entornos flexibles están bien desarrollados». Cree que una buena formación universitaria o de Formación Profesional en perfiles digitales en principio es suficiente para encontrar trabajo. Sin embargo, « un complemento como un máster siempre mejora la empleabilidad ». Y es que el máster por sí solo no es garantía de demostrar los conocimientos. «Buscamos la experiencia en el puesto de trabajo y la actitud», matiza.

Directivos

Una de las preguntas más habituales que se plantean es si el máster es una herramienta imprescindible para aquellos que quieran llegar a puestos directivos o de responsabilidad en las empresas. Xavier Gangonells , director general de la Asociación Española de Directivos (AED), comienza por destacar que «cualquier persona que desee dedicarse a la práctica de la profesión directiva debe ser consciente de que su formación debe ser continua a lo largo de su carrera para desempeñar correctamente su responsabilidad. En este sentido, cualquier directivo debe invertir en su desarrollo y cuidar de su formación». Y muy especialmente en tiempos de cambio como en los actuales, de ahí la importancia del ‘upskilling’ -el proceso de aprender y potenciar habilidades que contribuyen a mejorar nuestras competencias- y el ‘reskilling’ , o proceso de actualizarse en nuevas habilidades para adaptarse a las necesidades de mercado.

«La formación es una de las mejores herramientas para mantenerse actualizado, crecer a nivel profesional y para que uno pueda seguir aportando valor a la compañía» . En este sentido, la formación de posgrado «sigue siendo necesaria porque aporta fundamentos esenciales para el ejercicio de nuestra profesión . Un buen máster aporta conocimientos prácticos y muy útiles que suponen un valor diferencial en la carrera de cualquier profesional del management».

Reconoce que, por regla general, las oportunidades de promoción en una empresa tras cursar un máster aumentan «porque la persona ha adquirido nuevas competencias que serán importantes para alcanzar un nivel jerárquico superior y, por lo tanto, estará mejor preparado para aprovechar una eventual oportunidad». Por ello, es frecuente que las empresas, que necesitan contar con perfiles de alto potencial para su desarrollo, se impliquen en la formación de sus profesionales. También el nivel de formación de una persona afecta a su valor en el mercado y, por lo tanto, su nivel retributivo . «Más aún si además se produce una promoción tras cursar el máster. El mercado laboral valora y demanda a los profesionales mejor preparados, y la formación sigue siendo uno de los factores clave que influye en la retribución del directivo».

«La especialización es la principal característica que aporta la realización de un máster, además de dotar al alumno de mayor experiencia y de nuevos conocimientos y habilidades», resalta el director general de AED al referirse al valor añadido que aporta un máster y que más se aprecia en el mercado. Pero no es el único. Gangonells añade «la flexibilidad mental, cultivar la creatividad y la capacidad de buscar soluciones de formas distintas, así como analizarlas y aplicarlas acorde con cada situación». El estudio del máster aporta también las habilidades «mal llamadas ‘soft’ que son cada vez más importantes en la nueva realidad digital, como el trabajo en equipo, la creatividad, habilidades de comunicación oral y escrita, capacidad de análisis, etc.», matiza Miguel Carrión.

Contactos para siempre

Sin duda, uno de los grandes beneficios que aporta los estudios de postgrado es el ‘networking’. La red de contactos que se establece con los compañeros puede ayudar a los alumnos a lo largo de su trayectoria profesiona l. «Un máster une mucho, sobre todo cuando ya estás trabajando. Compartes tu tiempo», recuerda Fernando Calvo. «Los másteres no solo son valiosos por sus contenidos, sino sobre todo por las relaciones que pueden aportar al alumno. Vínculos que a veces se extienden durante muchos años y se convierten, por lo tanto, en relaciones valiosas a lo largo de toda la carrera profesional. Los másteres se erigen como una excelente herramienta para conocer a otros profesionales con los que se comparten las mismas inquietudes», puntualiza Xavier Gangonells.

España cuenta con varias escuelas de negocio cuyos másteres están posicionados en los primeros puestos de los principales rankings mundiales. Cursar alguno de sus programas es prácticamente una garantía de colocación . La reputación de las escuelas está muy vinculada a una mejor salida laboral . «Cuando uno va a destinar un año de vida es importante tener la certeza de que esa inversión merece la pena. Necesitan saber que vas a tener un progreso en tu carrera», resalta Pollyanna Nethersole , directora de Reclutamiento y Admisiones Internacionales de Esade. En áreas como las Finanzas considera fundamental la realización de un máster para conseguir trabajo y en el mundo de la Innovación «ayuda mucho cuando quieres montar tu propio negocio». Para los perfiles procedentes de Humanidades o Ingenierías, «un MBA puede ayudar a transformar su carrera y generar nuevas oportunidades», concluye Nethersole.

En un mercado laboral en constante cambio y rodeado de todo tipo de incertidumbres e incógnitas, los estudios de posgrado parecen estar en disposición de ofrecer algunas respuestas convincentes.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación