Especial másteres

Una apuesta acelerada por las tecnologías de vanguardia

El ecosistema educativo se renueva con las exigencias del mercado con formatos híbridos, enseñanza a la carta y una flexibilidad donde la pandemia ha supuesto el punto de inflexión en ese desarrollo

Asistimos a la transformación del sistema educativo a pasos agigantados

Alicia Aragón

La enseñanza posuniversitaria jugó con ventaja cuando la pandemia obligó a abrazar la transformación digital . La educación 100% online llevaba tiempo asentada dentro de la oferta de másteres, así que cuando las circunstancias sanitarias obligaron a llevar el aprendizaje presencial a casa, no se plantearon las rupturas y el desconcierto que experimentaron otros sectores. La formación a distancia avanza a pasos agigantados con el fin de adaptarse a las necesidades del alumnado, que ya no quiere estar atado a la rigidez del aula. «Creemos que la educación es un sector que debía transformarse, y debía hacerlo desde dentro, por lo que apostamos por un modelo académico en el que la tecnología sea un medio para aquello realmente importante, que es que el alumnado cumpla con sus objetivos de aprendizaje», revela

El punto de inflexión de la pandemia provocó una respuesta ágil dentro de las instituciones formativas que ofrecen másteres en España. «En IE University desde hace más de 20 años venimos trabajando en el mundo de programas online y ‘blended’», indica Martín Rodríguez, experto en Learning Innovation de esta escuela de negocios , añadiendo el reciente desarrollo del ‘liquid Learning’ , una metodología «que trasciende los formatos tradicionales y que integra ecosistemas presenciales y digitales». También desde la Universidad CEU San Pablo asumieron la tarea de impartir una formación de posgrado en línea con los retos que trajo consigo el confinamiento, «digitalizando no solo la docencia a formatos híbridos, sino también ofreciendo determinadosservicios y actividades extraacadémicas de forma virtual», resume Cristina Masa Lorenzo, vicerrectora de Enseñanzas de esta universidad. Pero la ventana tecnológica que se abre va mucho más allá.

Metaverso es la palabra de moda. Estos entornos mueven grandes sumas de dinero mediante la compraventa de parcelas virtuales. Algunas empresas ya monetizan sus inversiones llevando sus productos a estos mundos simulados, mientras que otras justifican su presencia por imperativos de ‘branding’. Para la docencia, está claro que se debe transitar por este nuevo capítulo tecnológico. La Universidad CEU San Pablo tiene uno propio «que integra diferentes campus universitarios y su entorno urbano, donde los estudiantes pueden interaccionar, conocer las instalaciones, realizar actividades de aprendizaje y llevar a cabo diversas gestiones administrativas», expone Masa. Por su parte, Martín admite que están evaluando esta tecnología «para ayudar a nuestros ‘stakeholders’ a entender mejor qué es el metaverso y qué aplicaciones puede tener». El primer paso es verificar que este canal está en el foco de su target, «y si las personas que componen ese público objetivo de ESIC están en el metaverso, es un canal más donde dar a conocer nuestra oferta formativa », afirma.

En la cadena de valor

Las experiencias inmersivas y la gamificación marcan la pauta, ya que estas herramientas «permiten simular situaciones de forma que el aprendizaje perdure y sea transformacional», desvelan desde el IE. Asimismo, la realidad aumentada introduce en los másteres grandes posibilidades. El l aboratorio ESIC Tech , por ejemplo, hace que los alumnos ensayen de primer mano cómo este recurso «se aplica a nuevos modelos de negocio o se incorpora a la cadena de valor de las empresas», explica Martín. También el ‘big data’ ha entrado de lleno en los másteres. Ainhoa Raso, subdirectora de UNED Media, destaca el Proyecto ED3 , que «tiene por objeto el uso de tecnologías basadas en datos masivos». Respecto al empleo de tecnologías como esta, Raso incide en la prioridad de «construir el marco ético en el que implementarlas, diseñando un completo catálogo de cautelas que garanticen el uso de datos masivos encondiciones de seguridad y tranquilidad».

El potencial de la inteligencia artificial también es amplísimo, sobre todo en el seguimiento y la atención personalizada de los alumnos: «El desarrollo de modelos predictivos permite anticipar situaciones en las que los alumnos se sientan desconectados del programa que están tomando», desvela Rodríguez. Pero las instituciones ya van más allá, con « grupos de trabajo centrados en el desarrollo de ‘bots’ y automatismos, análisis y gestión de datos y desarrollo de aplicaciones de todo tipo enfocadas a la cooperación al desarrollo», confirma Masa. Algunos de los ejemplos más innovadores en la Universidad CEU San Pablo son, en el campo de las ciencias de la salud, la disponibilidad de «equipos digitales anatómicos con sistema de visualización 3D y mesa virtual táctil ». En el ámbito de la sostenibilidad, en el IE Martín comenta que «transportamos a los alumnos a una situación de desastre natural para concientizarlos sobre los efectos del cambio climático».

Planes a medida

La normalidad pospandémica trae un escenario donde los formatos híbridos son clave para la movilidad y la conciliación del alumnado, que se beneficia de planes a medida. Raso destaca que «sus indudables ventajas deben verse como una oportunidad para desarrollar nuevas herramientas e instrumentos de aprendizaje y, en definitiva, mejorar la calidad de los másteres». Esta convivencia entre lo físico y lo remoto supone «que estudiantes de cualquier parte del mundo continúen con nosotros sus proyectos de vida personal y profesional, cursando sus estudios de posgrado desde sus ciudades o países», indica. Una flexibilidad que permite que «puedan participar desde donde se encuentren , por ejemplo, mientras hacen prácticas o participan en un proceso de selección», dice Rodríguez, al tiempo que sacan provecho de la interacción directa en el aula con sus profesores.

Pero la tecnología no solo compete a la forma, sino al fondo. Los alumnos de máster, además de demandar metodologías de aprendizaje flexibles que se apoyen en las más recientes innovaciones, quieren estudiarlas. Además de adaptar sus procesos a la tecnología, los másteres también se especializan en impartir estas competencias digitales. Desde ESIC tienen claro que «lo importante es preparar a nuestro alumnado para enfrentarse al mundo laboral y poder responder a los retos y desafíos que se plantean». En la misma línea, en la Universidad CEU San Pablo quieren que el alumno de posgrado tenga «un perfil diferencial, con competencias digitales y con mayor empleabilidad, para que pueda desenvolverse en un entorno cada vez más, digitalizado, globalizado, cambiante e incierto». Sin duda, las empresas están cada vez más interesadas en la captación de talento digital y los centros de enseñanza superior lo tienen completamente interiorizado.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación