La razón por la que tu crisis de los 40 empezó a los 20

En «Wabi sabi» el psicólogo Tomás Navarro invita a apreciar la belleza de la imperfección y a cultivar la simplicidad

Tu forma de hablar puede cambiar tu vida

Tomás Navarro defiende la belleza de lo imperfecto y lo efímero.
Raquel Alcolea Díaz

Raquel Alcolea Díaz

Esta funcionalidad es sólo para registrados

«La mayor parte de las crisis motivacionales de los 40 o 50 años se forjan a los 20, cuando no te permites escucharte a ti mismo y das más prioridad o importancia a las miradas ajenas que a las tuyas». El psicólogo Tomás Navarro hace en «Wabi sabi» (Ed. Zenith) una invitación a que abramos los ojos para darnos cuenta de que el éxito, la perfección y la felicidad son quimera s o ideales tras los cuales perdemos el tiempo corriendo. En esta obra, el autor de 'Fortaleza emocional' y 'Kintsukuroi', propone que reconozcamos que nuestra vida es imperfecta y que adoptemos una actitud más ajustada a la realidad, aceptando lo que no puede ser para focalizarnos en lo que sí se puede cambiar. Pero, ¿cómo sabemos que lo podemos cambiar? «Dándote la oportunidad de explorar, de atender a tus emocions, de preguntarte si podrías estar mejor y descubrir qué sentido tiene lo que estás haciendo. A menudo pensamos que las decisiones que no tomamos no tienen consecuencias, pero sí que las tienen», aclara Tomás Navarro.

Elige tu motivación, no la de otros

La motivación es, según explica Tomás Navarro, el impulso que inicia, mantiene y guía la conducta. Los retos que nos vamos poniendo, esas cosas que queremos conseguir son como «zanahorias», pero el problema reside en que a la hora de elegir esos retos el experto explica que nos ponemos zanahorias «de otros»: de los padres, de la pareja, de lo que espera de ti la sociedad... Por eso el psicólogo propone trabajar la motivación siguiendo una actitud «wabi sabi», que es capaz de distinguir entre las necesidades, los deseos y las decisiones.

La actitud, la base para aceptar la imperfección

«La actitud lo filtra y lo mezcla todo. Es algo así como las gafas con las que interpreto la realidad. Se mezclan los miedos, los deseos, la fatiga, el humor, lo que ha pasado en el día... Lo que hace que no perciba las cosas como son sino en base a la abstracción que he hecho de esas cosas», explica el autor. El hecho de que la actitud sea nuestra conexión con la realidad, lo que da sentido a lo que percibimos y lo que nos dice cómo nos vamos a comportar hace que sea un concepto especialmente relevante para Tomás Navarro, que invita así a que tengamos una actitud más realista, que se apoye en los tres pilares «wabi sabi»: aceptar que la vida es incompleta, que es imperfecta y que es impermanente.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación