Cómo acabar con las cucarachas, las hormigas y las polillas que habitan tu casa
Los bichos no solo se refugian del calor en las casas, sino que también buscan una fuente fácil de comida, por lo que la higiene y no tener alimentos a la vista es clave para evitar su entrada en el hogar
Recoger los restos de comida y ser especialmente escrupulosos con la limpieza en la cocina y el cuarto de baño es fundamental para prevenir la aparición de cucharachas y hormigas en el hogar. Es más, si no se siguen estas medidas de prevención, los bichos domésticos pueden convertirse en un problema pues, tal como explican en la Organización de Consumidores y Usuarios, «son insectos sociales y se comunican entre llos para informarse sobre dónde están las fuentes de alimento. Si un individuo emcuentra comida fácil en nuestra casa, es posible que recibamos la visita de toda la colonia».
Si las cucharachas, hormigas y avispas ya han entrado en casa, se debe buscar por dónde están entrando y tapar el acceso , tal como aconsejan en OCU. «Los nidos de hormigas y cucarachas suelen estar en el exterior o en las conducciones generales de la vivienda. Suelen entrar por pequeños resquicioso que pasan desapercibidos o que no vemos bien, como detrás de un mueble o en un pequeño agujero entre baldosas», afirman.
Las cucarachas buscan tanto comida como agua en el interior de las viviendas, por lo que no es raro que se encuentren cómodas en cuartos de baño y alrededor de las canalizaciones. Tal como revelan en ANECPLA (Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental), en España las especies más comunes de cucaracha son la «Blattella germánica» (cucaracha rubia, alemana o del café) -mide de 1 a 1,5 centímetros y son de color marrón claro-, la «Blatta orientalis» (cucaracha negra)- mide de 2 a 2,7 centímetros y procede de la red de alcantarillado, y emerge a través de los sumideros- y, desde hace unos años, la «Periplaneta americana» (cucaracha americana o súper cucaracha), suele habitar en zonas cálidas y costeras como Canarias, Levante o la costa andaluza, entre otras zonas. Es de color rojizo y de gran tamaño (de 3 a 5 centímetros). «Pese a que la especie más usual en las viviendas es la alemana y en los jardines la negra, ahora están siendo desplazadas por la americana», afirman.
Otros consejos de ANECPLA para frenar la presencia de cucarachas en el entorno son: eliminar fuentes de humedad y fuentes de alimentos (no dejar alimentos o agua sin tapar a su alcance, limpiar los restos de comida de las mesas y encimeras, cerrar bien las bolsas y cubos de basura para evitar olores atrayentes), mantener una ventilación adecuada para eliminar olores y temperatura no excesiva y limpiar periódicamente los trasteros y otras posibles fuentes de anidamiento.
También recomiendan corregir las deficiencias estructurales en las casas que permitan la entrada de los insectos, es decir, sellar grietas (sobre todo las que se encuentran alrededor de los lavabos, fregaderos y zócalos), supervisar las instalaciones de gas y agua y revisar los desagües.
Las avispas , en cambio, suelen estar en el jardín o en la terraza, aunque su nido suele estar en elementos arquitectónicos o de la construcción como aleros, cajas de la persiana o estructuras de toldos. En estos casos, los expertos de la OCU alertan de la importancia de no tapar el orificio de acceso al nido pues, tal como aseguran, las avispas son capaces de abrirse paso y podrían hacerlo hacia el interior de la casa.
Trampas e insecticidas
Las colonias de hormigas y avispas son fundadas por una reina. Éstas son más vulnerables cuando aún no han nacido las obreras y tienen que buscar alimento por sí mismas. Se les reconoce porque son de un tamaño bastante superior al habitual y suelen actuar en solitario.
Existen trampas caseras para avispas . La más popular, según cuentan en la OCU, es la elaborada con un trozo de carne y una botella. Se introduce un trozo de carne asada en una botella de plástico con agua, se corta la parte de arriba y se encaja de nuevo pero dándole la vuelta. De esta forma el camino de entrada es fácil, pero no el de salida, por lo que lo habitual es que se queden aturdidas y flotando en el agua.
Eso sí, cuando la colonia de avispas ya tiene un cierto tamaño es mejor no actuar por nuestra cuenta y contar con la ayuda de un profesional.
Cuando la colonia ya está establecida se pueden usar insecticidas para los bichos que se mueven atraídos por la comida. «En lugar de cebos para atraer a las reinas, se usan trampas con insecticida mezclado que los insectos introducen en el interior de la colonia, donde envenenan a las larvas», explican en OCU.
En el caso de usar insecticida es importante mantener a los niños alejados de estos productos y, en caso de ingestión accidental, se debe acudir inmediatamente a un centro de salud con el envase o llamar al Instituto Nacional de Toxicología .
Otro insecto común del hogar es la polilla . En realidad es una mariposa y los daños que produce se deben a que hace la puesta de huevos en las prendas de lana, de las que se alimentarán las larvas. En la OCU aconsejan no usar insectividas antipolilla y usar siempre pinzas en lugar de bolas antipolilla, pues se corre el riesgo de que los niños confundan estas últimas con caramelos.
Si no es una colonia aislada de insectos sino una plaga, debe comunicarse al ayuntamiento y consultar a una empresa de desinsectación, que son quienes conocen el comportamiento y la biología de las plagas.
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