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Viajar con bebés puede ser muy fácil

Con una buena planificación y recursos, los viajes con niños pueden ser cómodos y agradecidos

MADRID Actualizado: Guardar
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Llega el primer puente o las primeras vacaciones con un bebé y los padres primerizos se enfrentan a miles de dudas y miedos. Y no es para tanto. Un bebé es muy fácil de llevar a cualquier parte y viajar con ellos una maravilla.

Muchos padres ponen como excusa que el bebé se va a aburrir o que va a dar la lata. Los bebés pueden disfrutar igual que los padres durante un viaje descubriendo el mundo que les rodea y aprendiendo de él, por lo que no es necesario que los proegenitores renuncien a su afición de viajar cuando nace el bebé y aunque no es fácil, no es imposible. Cuanto antes se empiece a viajar con un bebé, mejor, pues se acostumbrará a dormir en condiciones poco habituales y a comer de manera diferente.

Hay que tener en cuenta que el ritmo del viaje tiene que adecuarse, hasta cierto punto, a la rutina de alimentación, sueño y baño al que el bebé está acostumbrado. A veces sacarlo de su rutina es exponerse a una pataleta. Y en ocasiones no queda más remedio que adaptarse a sus necesidades.

En los viajes con el bebé hay que descartar la improvisación ya que no suele tener buenos resultados. Conviene organizarlo y planificarlo previamente todo teniendo previstos alojamientos y traslados y anteponiendo siempre su seguridad y protección.

También hay que procurar que los trayectos no sean demasiado largos y ofrecerles siempre las condiciones básicas de aseo y comida. Es verdad que la mayoría de los niños se duermen en el coche, pero esto no quita para que haya que parar con frecuencia para alimentarle y cambiarle el pañal. Mantener el pañal mojado puede irritarle y conseguir que la criatura esté molesta el resto del viaje.

En cuanto al sueño es importante no interferir en sus prácticas habituales de descanso. No hay nada peor para un niño que sentirse cansado. Puede pasarlo muy mal y amargar el viaje a todos los que vayan con él. Por otro lado, cuando son muy pequeños, los bebés duermen mucho. Si se les acostumbra a dormir en el cochecito o en el coche, es posible disfrutar del viaje bastante cómodamente.

En cualquier caso un bebé no quita libertad de movimientos porque llevando un carrito adecuado o con una mochila o en un portabebés tipo fular se les puede trasportar cómodos y tranquilos durante todo el día.

Como última recomendación, si el niño ya toma papillas o leche de fórmula, es mejor llevar bastante cantidad de la marca que suele tomar, pues no es seguro que la vayamos a encontrar allá donde vayamos y algunos bebés pueden sufrir alergias o malas digestiones si se le somete a un cambio.

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