Pilsner Urquell sin filtrar, una cerveza para sibaritas

Esta cerveza sin filtrar de la marca checa solo se puede degustar en las barricas que la cervecera tiene bajo túneles subterráneos en República Checa. Sin embargo, una vez al año salen unos cuantos barriles de edición limitada para que clientes de todo el mundo la puedan degustar. Para conocerla un poco mejor Eduardo Barbosa, embajador de la marca en España, nos ha hecho unas notas de cata en la que nos cuenta que «es una cerveza densa con opalescencia al estar sin filtrar y su crema es compacta y de un color blanco puro», en cuanto al olfato «es una cerveza con aromas herbáceos y huele a lúpulo de saz con notas de caramelo y malta» y sobre su sabor «nos llena la boca con su textura cremosa y ya en boca gana complejidad con un posgusto astringente donde la amargura gana potencia».

Ha sido catalogada como la mejor cerveza pale lager y ahora ha llegado a Madrid y Barcelona por unos días a una serie de cervecerías seleccionadas para que sus clientes puedan degustarla. Tal es la delicadeza de este brebaje que una vez abierto el barril apenas dura 48 horas con todas sus cualidades intactas como nos explica Vanessa Guzmán «su tiempo de vida es muy corto porque tiene todas las levaduras y de hecho la que estamos tomando se envasó la semana pasada en Pilsner, es como si estuviera salida de la fábrica». Para los sibaritas de la cerveza en nuestro país esta oportunidad solo se ha repetido tres veces en los últimos años, todo un privilegio que llevarse a la boca.