Cae un líder grafitero por dañar 20 tiendas de Malasaña en 24 horas

La Policía le identificó cuando realizaba una pintada sobre un mural realizado el domingo por artistas

Madrid Actualizado: Guardar
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La Policía Nacional identificó en la madrugada de ayer al líder de una banda de grafiteros que, presuntamente, se dedicó a vandalizar numerosos murales artísticos realizados durante el fin de semana en la jornada «Pinta Malasaña!». La acción vandálica buscaba destrozar la obra de estos creadores, puesto que el sospechoso y sus compinches consideran que el grafiti debe ser una realidad subversiva, fuera de la legalidad y sin contraprestación económica. La indignación en el barrio es mayúscula, sobre todo entre la veintena de comerciantes que han visto sus persianas pintarrajeadas de mala manera. Apenas han durado unas pocas horas intactas.

Hacia las 2.30 de la madrugada, agentes de la comisaría del distrito de Centro sorprendían a media docena de personas pintando sobre la persiana de un establecimiento de la Corredera Alta de San Pablo.

Los funcionarios policiales corrieron tras ellos y consiguieron identificar a uno, el supuesto líder. Se trata de Óscar E., español de 34 años. No se le detuvo porque en ese momento solo se le consideraba autor de uno de los grafiti.

Los policías se hicieron con las mochilas, en las que portaban nada menos que 131 botes de pintura en espray. Paralelamente, los investigadores peinaron todo el barrio, en busca de más comercios víctimas de estos delincuentes. Al cierre de esta edición, los locales dañados eran unos veinte, en calles como, además de la mencionda, Espíritu Santo, Tesoro y San Andrés. Presentaban la «firma» del mismo individuo, por lo que se cree que Óscar E. está detrás del boicot masivo y se investiga una posible imputación por un delito de deslucimiento de bienes inmuebles. Al cierre de esta edición, ya había seis denuncias de afectados en la comisaría de la calle de Leganitos y se prepara una colectiva.

Fachada protegida

Una de las paredes atacada es la de unas antiguas botica y pollería que ocupan el número 28 de la calle de San Andrés y que actualmente son dos bares, aunque conservan su aspecto exterior original, muy castizo. En la persiana de esta última dejaron un recado: «A mí no me pagan», afeando el hecho de que los artistas originales hubieran participado en la iniciativa público-privada del pasado fin de semana. Óscar E. dejó en muchas de sus pintadas la firma «RU», en grandes dimensiones, acompañada del número 16.

Ya en la tarde-noche del domingo, en pleno «macrobotellón»en la plaza del Dos de Mayo, unos jóvenes anticipaban los destrozos en rebeldía por el evento de «Pinta Malasaña!» «Se ha convocado una pintada de grafiteros de verdad. Vendrán por la noche a bombear las paredes», comentó uno al filo de las doce.

Muchos comerciantes se encontraron con el saboteaje de sus cierres al ir a abrir el lunes por la mañana. «No hay derecho, no respetan nada», se lamentaba Henar, dueña de la óptica Alohe, en San Andrés, 2. Tuvo que coger el bote de pintura blanca y arreglar el desaguisado. «Me he tirado 40 minutos», dice, fastidiada también por el boicot que le han hecho, de pasada, al artista «invitado»que decoró su bonito local de gafas. Le ha llamado y está dispuesto a rehacerlo.

Junto a la óptica, Casa Camacho, un bar de toda la vida haciendo esquina con San Vicente Ferrer, también ha sufrido el vandalismo. Enfrente, la botica y pollería, protegidas. Para «Pinta Malasaña!» se postularon más de 800 candidatos, nacionales e internacionales. Finalmente, se seleccionaron a cien, Pero ahora su obra ha sido desdibujada por un puñado de vándalos.

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