Fiebre por el gimnasio «low cost» de Cristiano Ronaldo en Madrid

En apenas cinco meses, el gimnasio de Cristiano Ronaldo en Madrid es un éxito. Asociado a la firma estadounidense Crunch, que cuenta con más de 300 centros en su país de origen, suma en torno a 2.000 socios en su primer y, hasta la fecha, único establecimiento en la capital, ubicada en la calle de María de Molina, 37.

Este gimnasio abrió el pasado verano y desde entonces no ha hecho más que crecer. Tanto, que en febrero habrá un segundo centro en el centro comercial Alcalá Norte, como han confirmado desde Crunch. El establecimiento no es propiedad del futbolista del Real Madrid, sino que tiene su imagen asociada. Esta simbiosis entre el gimnasio y el deportista es la política de la firma, que hace lo propio en otros puntos del mundo a través de sus filiales de fitness.

«La acogida ha sido muy buena, estamos muy contentos», aseguran desde la marca. No obstante, reconocen que su despegue ha contado con un impulso muy importante: los meses de verano son los más favorables para la acogida de socios. «Ahora, en diciembre, bajamos un poco y con el nuevo año volveremos a subir, añaden.

Este gimnasio cuenta con tres categorías de precios. La básica, que da acceso a la sala de fitness, cuesta 9,99 euros (sin IVA); la intermedia, que permite el acceso más clases, 24 euros; y la más cara, con todos los servicios y toallas, sube a 36 euros. Aunque desde el centro de María de Molina destacan sus precios competitivos, indican que su mayor activo es la «reputación de Crunch en todo el mundo durante años».