La falta de síntomas tras recibir la dosis de vacuna preceptiva, por ejemplo la triple vírica, inició la alerta de muchos padres y madres que habían llevado a sus hijos pequeños a cumplir con el calendario vacunal infantil al centro de salud de Santurce, en Vizcaya. Tras sus quejas, algunos empezaron a recibir cita para tomar muestras de sus niños y niñas y verificar si tenían anticuerpos, y ahí empezó la alarma porque se verificó que no había respuesta inmune frente a los virus "pinchados". La enfermera de Pediatría que supestamente les vacunaba, es la principal sospechosa, porque manifestaba en la consulta reticencia a las vacunas, y según algunos padres pinchaba rápido y caía líquido al suelo. El Servicio de Salud Vasco invesiga los hechos y mientras llama a dar una dosis extra a los menores. Los padres y madres muestran preocupación por el incumplimiento de la inmunización de sus hijos y denuncian la falta de información.-Redacción-
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