Sanidad

Povisa plantea un preconcurso de acreedores y urge al Sergas una revisión del convenio

El hospital privado achaca a una lesiva aplicación del concierto con la Xunta sus pérdidas, que cifra en 42 millones desde 2015. La Consellería niega la tesis del hospital y garantiza el estricto cumplimiento de las bases pactadas en 2014

Exterior del hospital privado concertado Povisa ABC

ABC

El hospital privado Povisa, que en base a un convenio singular actúa como centro de referencia para un máximo de 139.000 pacientes del Sergas en el área de Vigo, ha comunicado su entrada en preconconcurso de acreedores , urgiendo a la Xunta la renegociación de las condiciones en las que la centro sanitario asume la asistencia pública. Tras varios ejercicios de pérdidas y de tensiones con la Administración autonómica en torno a la aplicación del convenio firmado a finales de 2014, la dirección del policlínico vigués anunciaba este viernes a su plantilla la solicitud del preconcurso, ganando un plazo de tres meses para negociar con sus acreedores. La compañía, que atribuye la completa responsabilidad de su situación financiera a una aplicación lesiva del convenio con el Sergas , ha comenzado a retrasar pagos, entre ellos, el del IRPF de sus trabajadoes.

La operación se produce cuando todavía restan cuatro años de vigencia (y dos de prórroga) a las bases firmadas en 2014, aún con Rocío Mosquera como conselleira. Ese acuerdo supuso cambios respecto a la fórmula que había operado desde 2011, sustituyendo el pago por asistencia a una población geográficamente asignada por un pago fijo por paciente de 540 euros al año y la posibilidad de libre elección de centro hasta completar una capacidad máxima calculada en 139.000 usuarios públicos.

Mientras el Sergas niega que las difíciles circunstancias financieras de Povisa respondan al concierto suscrito en 2014 y garantiza el estricto cumplimiento de lo pactado —la justicia se ha pronunciado a favor de la Administración en las discrepancias resueltas hasta la fecha—, el hospital esgrime un informe externo encargado por la compañía que cifra en 30 millones de euros las pérdidas acumuladas por efecto del concierto con el Sergas hasta diciembre de 2017 (la cifra total ascendería a 42 millones a día de hoy) y descarta problemas de eficiencia en la utilización de los recursos por parte del policlínico vigués. En concreto, Povisa denuncia la insuficiente cobertura del coste de los tratamientos hospitalarios de dispensación ambulatoria y de otros medicamentos incorporados a la cobertura pública tras la firma del convenio, la imposibilidad de cubrir bajas en sus 139.000 tarjetas fuera del plazo habilitado cada mes de noviembre o la obligación de descontar las asistencias realizadas a pacientes de Povisa por centros del Sergas.

«Que no se use a la plantilla»

La Consellería indicó ayer que no se han producido cambios que justifiquen revisar las bases pactadas en 2014 pero asegura que seguirá dialogando con el centro. Desde el comité de personal reclaman que «se garanticen al menos las nóminas» durante el plazo de negociación . «Esto nos suena raro, esperamos que no estén utilizando a la plantilla para presionar», apuntó en declaraciones a Ep María Jesús Neira, representante de CIG.

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