«No perdemos la esperanza de que el culpable se confíe y meta la pata»

Cuando se cumplen seis años de la desaparición de Sonia Iglesias, y pese a que la investigación sigue sin arrojar datos positivos, la familia permanece esperanzada con encontrar a la joven pontevedresa. «No perdemos la esperanza de que el culpable se confíe y en un descuido meta la pata y arroje luz al caso», afirmaba ayer a ABC su hermana Mari Carmen, quien reconoce que aguardan ansiosos el día en el que alguna pista dé finalmente con su paradero. Mientras tanto, todos los esfuerzos se centran ahora en que el caso no caiga en el olvido, cerrada provisionalmente la investigación judicial por dictamen de la Audiencia de Pontevedra en 2015, solo un indicio solvente de la Policía serviría para reabrir el expediente.

Mari Carmen es consciente de que «a medida que pasa el tiempo todo se complica». En este sentido, comenta que en el último año la Policía Nacional les ha avisado hasta en dos ocasiones de la aparición de restos humanos en el entorno de Pontevedra, pero que resultaron no ser los de su hermana. Con la investigación policial como único frente que sigue abierto, afirma que se agarran a que «ocurra un milagro y aparezcan sus restos».

Un caso que conmocionó no solo a la ciudad en la que residía Sonia Iglesias y que ayer volvía a demostrar estar del lado de sus familiares con su participación en la multitudinaria manifestación que cada año por estas fechas recuerda el terrible suceso en el Lérez, sino a toda la provincia. El entorno de Iglesias sigue reclamando «justicia y apoyo social».