El fiscal pide cuatro años de cárcel para el maquinista y el director de seguridad de Adif por el accidente de Angrois

Nuevo capítulo en el trayecto judicial de la tragedia del tren Alvia que se saldó con 80 fallecidos y 145 heridos el 24 de julio de 2013, en Angrois, en las proximidades de Santiago de Compostela. El fiscal pide que se abra juicio oral frente a Francisco José Garzón, el maquinista, y Andrés María Cortabitarte , que ejercía el cargo de director de seguridad en la circulación de Adif . Además, según consta en el escrito de acusación, al que ha tenido acceso ABC, solicita penas de cuatro años de prisión para cada uno de los acusados.

El fiscal Mario Piñeiro considera que los hechos son constitutivos de 80 delitos de homicidio por imprudencia grave profesional, 145 delitos de lesiones y un delito de daños . Adicionalmente, reclama que se hagan cargo de las indemnizaciones con responsabilidad civil directa de QBE Insurance LTD y Allianz Global Corporate; y subsidiaria de Renfe Operadora y Adif.

En el escrito, con fecha de 5 de mayo, se recoge un relato de los hechos acaecidos hace casi ocho años, que sacudieron a toda Galicia, en la víspera de su día grande, y a toda España. Así, se recuerda que el maquinista entabla «una conversación extensa y relativa a una circunstancia que no implicaba urgencia al tratarse del acceso a una vía en un punto que pudo estudiarse sin riesgo ninguno mientras el vehículo se encontrase detenido en Santiago de Compostela». A esto se añade que «no realizó la correspondiente reducción de velocidad en los 5.540 metros recorridos, en quebranto de las mínimas reglas de atención y profesionales que le son exigibles».

Para el fiscal, «el trágico accidente no hubiese sucedido si Adif, más concretamente, la Dirección de la Seguridad en la Circulación y el acusado Sr. Cortabitarte López, como máximo responsable de la misma, hubiesen evaluado y gestionado el riesgo de exceso de velocidad en el tramo del accidente ».

Sobre Cortabitarte refiere que «infringió el deber que ostentaba por su status dentro de Adif, como el máximo responsable de dicha dirección, que tenía el deber de gestionar y mitigar los riesgos por exceso de velocidad no cubiertos por el propio sistema de protección de la línea y del tren. En definitiva tenía que garantizar que la línea era segura. No lo era ». Al contrario, resultaba «altamente vulnerable en el tramo en que se produce el accidente al error humano, y la fuente de peligro extrema ante el cambio significativo de velocidad y la curva», incide.

«Esta fuente de peligro debió ser evitada por el imputado con un deber positivo de actuación, tal como se hizo con posterioridad al accidente», añade el fiscal. «Sin embargo, ni se evaluó ni se gestionó para convertirlo en un riesgo tolerable , estableciendo una elemental barrera de protección ante el previsible fallo del maquinista en el tramo del accidente, único punto de la vía en que existía el problema del control del exceso de velocidad, el resto estaba controlado por el sistema de protección ASFA-DIGITAL. La llamada telefónica en cualquier otro punto de la línea no tendría consecuencias de descarrilamiento por exceso de velocidad», apostilla.

La plataforma de víctimas del accidente volvió a exigir de nuevo a la presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, que cese a Cortabitarte, según recoge Ep. «Lo prometió en una reunión con el ministro. Nos sentimos engañados por el ministro y por Isabel Pardo de Vera, que además no nos contesta », censuró el presidente de la plataforma, Jesús Domínguez.