Uno de los detenidos, durante la operación policial desarrollada en Sada
Uno de los detenidos, durante la operación policial desarrollada en Sada - GUARDIA CIVIL

Detenidos ocho narcos colombianos que trataron de estafar a traficantes gallegos

Un operativo policial «reventó» el intercambio en un parking de Oleiros

Los sudamericanos iban a robar el dinero sin hacer la entrega de la coca

Santiago Actualizado: Guardar
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Ocho narcotraficantes de origen colombiano y cinco gallegos fueron detenidos a finales del pasado mes de noviembre en un arriesgado operativo conjunto entre Policía Nacional y Guardia Civil que trascendió ayer. Las pesquisas por un supuesto intercambio de droga a gran escala se iniciaron en el mes de junio y guiaron a los agentes especializados hasta la localidad coruñesa de Sada, donde estaba previsto que los colombianos entregasen una partida de cocaína vía Madrid y que los gallegos les pagasen lo acordado. Se trata, según fuentes del Instituto Armado explicaron a ABC, de lo que en el argot se conoce como «fiado» y que en muchas ocasiones implica dejar en el país sudamericano a una persona como aval. En este caso no había tal rehén porque los colombianos no tenían previsto entregar droga alguna a los gallegos, sino «darles un vuelco» y quedarse con su dinero.

La táctica no es nueva y el historial de los arrestados da buena cuenta de ello. Atendiendo a los informes de la Guardia Civil, habían estafado ya a otros traficantes en Barcelona, Canarias, Madrid e incluso en Holanda. En unas ocasiones se quedaban con el dinero sin entregar la droga y, en otras, se llevaban los estupefacientes sin pagar el dinero convenido.

La peligrosidad con la que estos narcos actúan obligó a que en el operativo desplegado en un aparcamiento de Oleiros participasen agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil en dos furgonetas camufladas, a sabiendas de que los investigados ya habían protagonizado tiroteos y episodios violentos en plena calle. Una vez detenidos —en esta intervención fueron ocho los arrestados—, los agentes comprobaron que los colombianos llevaban encima pasamontañas y bridas para secuestrar a los gallegos si el trueque se complicaba. Así se garantizarían que los estafados pagasen la totalidad de lo pactado. Lo que no encontraron los efectivos desplazados al lugar fue la mercancía que presuntamente se iban a intercambiar y que los narcos ni siquiera tenían en su poder. Según trascendió, se valieron de unas muestras de cocaína pura como cebo para dar visos de credibilidad a la operación.

Ocho registros domiciliarios

El resto de detenciones se produjeron, de forma paralela, en una vivienda de Sada que los agentes de la UEI de la Guardia Civil asaltaron. Al registro domiciliario que se efectuó en esta localidad se sumaron siete más en otros enclaves de la provincia de La Coruña, Pontevedra, Orense y Madrid. En ellos se intervinieron seis vehículos (la mayoría de alta gama), material informático, 30.000 euros en metálico, un arma corta, un kilo de heroína, un kilo de cocaína y otro más de metanfetamina. Además, en uno de los registros practicados en Pontevedra se desmanteló un laboratorio de adulteración de las sustancias estupefacientes. También había una prensa, una envasadora, una báscula de precisión, un número elevado de envases para guardar la droga, sustancias de corte y un sello para marcar la procedencia.

Casi un mes después de que el operativo tuviese lugar y, coincidiendo con su publicación, el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, explicó que uno de los trece detenidos aún continúa en prisión. Se trataría, según las primeras informaciones, de uno de los traficantes gallegos a los que encontraron droga en su vivienda. El resto de los arrestados en el marco de la operación fueron puestos a disposición judicial en Pontevedra —de donde partió la investigación—. Además de por este caso, los integrantes del clan colombiano están siendo investigados en varios juzgados españoles por otros «vuelcos» de los que están acusados.

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