El PP lleva a los tribunales el cambio de calles supuestamente franquistas en Alicante

El grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Alicante ha interpuesto esta viernes un recurso contencioso-administrativo contra el cambio de nombres de calles supuestamente franquistas por entender que incumple con la Ley de Memoria Histórica en casos como el de la plaza Calvo Sotelo. Además, alertan del posible «perjuicio económico» para los comerciantes afectados y el daño moral «de difícil reparación» para los vecinos, a quienes «no se ha consultado».

En este recurso presentado en el Decanato de los Juzgados de Alicante por el portavoz municipal, Luis Barcala, ha solicitado como medida cautelar la suspensión del acuerdo adoptado el 15 de noviembre en Junta de Gobierno, sin someterlo al Pleno.

«Es un fracaso del tripartito, que no ha tenido nunca voluntad de alcanzar un consenso, ni de aplicar la Ley de Memoria Histórica sino de hacer su propio ajuste de cuentas con la historia», subrayan los populares, que ya formularon el 19 de octubre una serie de alegaciones que fueron todas desestimadas.

«Revanchismo»

En el caso de la plaza de Calvo Sotelo, fue nombrada así con una «intención revanchista», según ha argumentado el tripartito, lo que a juicio del principal partido de la oposición es «una prueba más que demuestra que los criterios objetivos que debía seguir la Comisión de la Memoria Histórica no se cumplen desde el momento en que se solicita la supresión de esas calles, no en base a criterios objetivos sino en base a la intencionalidad subjetiva que, según ellos, tuvieron quienes rotularon en su momentos esas calles».

Además, «se ha omitido toda participación ciudadana» y el acuerdo no ha sido aprobado por el pleno, a pesar de que la comisión ha sido creada por este órgano, por lo que «se vulnera el reglamento» y el PP solicita que el juzgado estime favorablemente la «nulidad».