Alberto Caparrós - CRÓNICAS SABÁTICAS
El plan de Albert Rivera empieza por Valencia
«El escenario ideal para Ciudadanos sería obtener más concejales que el PP pero pactar para arrebatar el gobierno a Compromís»
Quedan 476 días para las elecciones autonómicas y municipales del 26 de mayo de 2019. Seguro que para entonces el Partido Popular habrá escogido a su candidato a la Alcaldía de Valencia , pieza clave junto a Madrid y Zaragoza en la hoja de ruta de los populares para recuperar el poder local perdido tras la debacle de los comicios de 2015. Tras veinticuatro años en el gobierno de la capital del Turia, el PP ha transitado por una penosa legislatura marcada por la marcha de Rita Barberá al Senado y su posterior fallecimiento; por el caso Taula, en el que permanecen investigados nueve de sus diez concejales; y por la puesta en marcha de una gestora sin fecha de caducidad. Un panorama desolador para la que fue la fuerza más votada en la tercera ciudad española que, además, en la próxima cita electoral afronta un reto añadido. El objetivo ya no pasa solo por lograr una mayoría que supere la suma de fuerzas de izquierdas (en los últimos comicios faltó un concejal). El riesgo para el PP es verse superado por un Ciudadanos al alza tras el resultado de las elecciones en Cataluña y al que los sondeos, como el publicado por ABC el pasado 14 de enero , le sitúan ya a nivel nacional por encima de los populares y de los socialistas.
A diferencia del PP y del PSPV-PSOE , Ciudadanos tiene candidato a las elecciones. Fernando Giner , quien en una entrevista este domingo en ABC firmada por Rosana B. Crespo sostiene que va a centrar todos sus esfuerzos en ser alcalde de Valencia. El actual portavoz de la formación naranja en el Ayuntamiento ya gozaba de cierto grado de conocimiento entre la sociedad valenciana (fue vicepresidente de Casa Caridad ) y a lo largo de la legislatura ha aumentado su nivel de popularidad. Mientras el PP adolece de un liderazgo municipal -a pesar de los esfuerzos de Eusebio Monzó , el único concejal de su grupo que no está imputado, y del presidente de la gestora, Luis Santamaría -, Giner goza de la visibilidad mediática y política de la que carece su principal contrincante político.
Aunque no lo admita en público, el escenario ideal para Ciudadanos sería obtener más concejales que un PP renovado y sin mácula judicial en sus listas, pero poder sumar entre ambos la mayoría suficiente para arrebatar a Compromís la vara de mando que ahora ostenta Joan Ribó . El plan B pasa por un acuerdo con el PSPV que se antoja más complicado por dos factores. Parece difícil que ambos sumen los diecisiete concejales necesarios y, además, si a los socialistas les salen las cuentas se inclinarían por repetir aventura con Compromís y lo que quede de València en Comú-Podemos.
De la misma forma que en 1991 Rita Barberá abrió el camino para que el PP gobernara la Generalitat y el Gobierno de España, Ciudadanos sueña con una senda similar que allane el camino en dirección a La Monncloa a Albert Rivera , quien tiene toda su fe depositada en Giner para comenzar a «tocar pelo» de verdad en las Administraciones. Frente a esta estrategia, el PP sigue dilatando la decisión de escoger a un candidato. Le quedan 476 días. La cuenta atrás ha comenzado.
