Un grupo de turistas británicos, que celebraban una despedida de soltero en Benidorm , le ofrecieron cien euros a un indigente para que se tatuara el nombre de uno de ellos en la frente . Desde hace dos semanas, no se sabe nada del paradero de la víctima de este macabro gesto. La presidente de la Asociación de Comerciante Británicos de Benidorm, Karen Cowles , ha explicado que, tanto los residentes como turistas británicos de la localidad alicantina, se encuentran «horrorizados» . La portavoz del gremio británico se ha volcado en este caso y con otros colegas intentan localizar a la víctima. Cowles, cuyo marido se dedica también al negocio de los tatuajes, ha optado por recaudar dinero para borrar la «huella» que quedó en la frente del indigente.
El indigente de Benidorm tatuado en la frente lleva dos semanas desaparecido
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