El
plan
de
desescalada
anunciado por el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig , prorroga algunas medidas que limitan la movilidad de la población para contener las cifras de contagios del coronavirus después de sufrir la tercera oleada.
En concreto, se mantiene el cierre perimetral de la Comunidad Valenciana por el que se prohíben todos los desplazamientos de entrada o salida al resto de España y el extranjero, excepto en las situaciones justificadas, ya sea por causas laborales, médicas o para atender a personas dependientes.
Igualmente, sigue establecido el toque de queda nocturno todos los días de la semana, por el que no se puede salir a la calle entre las diez de la noche y las seis de la mañana, también con las mismas excepciones de causa mayor.
Puig ha reiterado este jueves su propuesta de acuerdo entre Comunidades Autónomas para limitar la movilidad entre territorios también como medida de precaución por el riesgo mayor de contagio que se presume a la cepa británica del coronavirus.
No obstante, a la vista de la evolución reciente en positivo de la sitaución epidemiológica, con una incidencia de 176 casos por cada 100.000 habitantes -por debajo de la media nacional- la Generalitat sí ha levantado otras restricciones o flexibilizado las condiciones, en el caso de la hostelería y el comercio, principalmente.
España
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