Cinco lugares ideales para ir de picnic en la Comunidad Valenciana

Salto de la novia

El salto de la novia es uno de los lugares más emblemáticos de la provincia de Castellón. Este paraje ofrece la posibilidad de contemplar la Cascada de Brezal de 60m de altura. Este entorno mágico es la combinación perfecta entre el cauce del río y la erosión de las montañas.

Además también podemos visitar la Cueva del Reloj situada enfrente de la cascada, en el monte Rascaña. En la puerta se encuentra una puntiaguda piedra que gracias a la luz del sol señalaba la hora a los agricultores que se encontraban trabajando los campos de la zona.

El Salto de la Novia tiene una leyenda mágica que hace que miles de parejas vayan cada año. Hace muchos años todas las parejas visitaban la cascada para que la novia la cruzara de un salto y de esta manera comprobar que su matrimonio iba a ser totalmente feliz, pero un día tal y como cuenta la leyenda esta tradición se rompió de golpe. Una mujer saltó con tan mala fortuna que cayo al agua y quedó atrapada en un remolino, el novio saltó para ayudarla pero no lo logró y ambos tuvieron un trágico final. Esta historia cuenta que en las noches de luna llena, el murmullo del río parece entonar un canto dulce y triste en el que se lamenta de haber dado muerte a aquellos dos seres que tanto se quisieron.

Envuelto en un escenario de leyenda y rodeado de la perfección de la naturaleza, Navajas ofrece la posibilidad de realizar un picnic en una ubicación llena de magia.

La cueva del Turche

Buñol ofrece uno de los espacios naturales más interesantes de la Comunidad Valenciana. La Cueva de Turche es el lugar perfecto para pasar un día en familia, especialmente durante la primavera, ya que nos ofrece múltiples actividades.

Para poder acceder a la cueva es necesario cruzar el lago, es la excusa perfecta para aprovechar y darse un refrescante baño. Además del lago, que se encuentra enmarcado en un gran anfiteatro de roca, este paraje también dispone de una zona habilitada para picnic en plena naturaleza y en épocas de abundantes lluvias disfrutar de una espectacular cascada de 60 metros de altura. La roca situada a la izquierda de la laguna es a su vez un trampolín que hace que sus visitantes puedan practicar saltos increíbles en un entorno envidiable.

El bosquet de Moixent

El bosquet de Moixent se encuentra en la provincia de Valencia y está considerado Bien de Interés Cultural desde 2005. Es un lugar de muy fácil acceso, se puede llegar fácilmente paseando desde el pueblo por el barranco o en vehículo particular.

El lago artificial es su principal atractivo, en el se puede disfrutar de un relajante baño e incluso practicar deportes acuáticos. Este paraje natural también ofrece la posibilidad de visitar una cueva cercana con pinturas rupestres al aire libre perfectamente conservadas. Estas pinturas son de gran valor ya que están protegidas por la UNESCO desde 1998. Además también se pueden realizar actividades como senderismo o mountainbike.

Para poder hacer un picnic en plena naturaleza no existe una zona habilitada para ello y es necesario ir provisto desde casa con mesas y sillas. Es un lugar idóneo para disfrutar de una día de desconexión y tranquilidad.

Lagos de Anna

Esta pequeña Albufera valenciana ofrece miles de posibilidades para aprovechar una jornada de descanso. Se puede disfrutar durante una visita diaria o pasando unos días en el camping municipal situado a escasos 50 metros del lago.

El principal atractivo de esta localización es la cascada que desemboca en una maravillosa piscina natural de aguas totalmente cristalinas en las que se puede gozar de un refrescante baño. Además para todos aquellos amantes de la naturaleza existe la posibilidad de realizar un paseo en barca durante una media hora, pero hay que tener en cuenta que esta actividad únicamente puede realizarse desde pascua hasta el 13 de octubre.

Los lagos de Anna cuentan también con piscina municipal, una zona habilitada para picnic, chiringuitos de madera y restaurantes donde se puede disfrutar de una comida típica de la zona en un agradable entorno.

Cap de Sant Antoni

Situado en pleno Parque Natural de Montgó, con unas impresionantes vistas al mar y rodeado de vegetación se encuentra el Cap de Sant Antoni. Fue declarado reserva natural el 9 de noviembre de 1993 y ocupa una extensión de 110 hectáreas y sus acantilados tienen hasta 150 metros de altura sobre el nivel del mar.

Su mirador es uno de los escenarios más privilegiados de la costa alicantina y dispone de mesas de picnic para disfrutar de una comida en un entorno envidiable. Además se pueden realizar rutas de senderismo a través de la más absoluta naturaleza.

Este maravilloso lugar hace que su visita se convierta en parada obligatoria para aquellos que busquen disfrutar de un día de desconexión y tranquilidad.