La Generalitat destina nueve millones para un DNI catalán

El Gobierno de Carles Puigdemont sigue gastando esfuerzo, tiempo y dinero público en crear estructuras –Hacienda, Seguridad Social, etc.– para el futuro Estado catalán. Estructuras... y también papeles de Estado.

La Generalitat está ultimando un instrumento que identificará a los ciudadanos de la futura república catalana. Se trata de una tarjeta de identificación, un trasunto de DNI, que a su vez sea una carta de derechos políticos, civiles y sociales.

Según avanzó ayer «La Vanguardia», el Instituto de Estudios del Autogobierno, que dirige el exvicepresidente del Tribunal Constitucional, Carles Viver Pi-Sunyer, es el encargado de diseñar este DNI y ya tiene entre manos un proyecto «muy avanzado». El objetivo es integrar en un mismo documento desde el número de identificación fiscal hasta el número de asistencia sanitaria.

Los informes que preparan este DNI calculan que el coste de esta identificación será de unos nueve millones.

La cuestión de la nacionalidad será determinante para poder ostentar un virtual DNI catalán que serviría para votar en unas elecciones constituyentes o en el referéndum para ratificar la futura constitución catalana, últimas etapas del «procés». Queda por determinar los requisitos para tener la nacionalidad catalana, aunque, en principio, para adquirirla no habría que renunciar a la española.

El proyecto de DNI, y su gasto, indignó a los partidos de la oposición. «Es una auténtica vergüenza», dijo la líder de C’s en Cataluña, Inés Arrimadas, que anunció que su partido inquirirá al gobierno sobre este proyecto.

Por su parte, el líder del PP catalán, Xavier García Albiol, censuró que la Generalitat se gaste 9 millones de euros en «un DNI de la raza catalana», mientras «niños de Cataluña estudian en barracones. ¡Indignante!».