La defensa de Junqueras y Romeva pide su absolución porque son «pacifistas»
Dirán en su escrito ante el Tribunal Supremo ser víctima de la «persecución» al independentismo
La defensa de los exconsellers Oriol Junqueras y Raül Romeva pide la absolución de los delitos de rebelión, sedición y malversación porque «antes que independentistas» son unos políticos «pacifistas» que creen que son víctimas de una «persecución» al movimiento independentista.
Así figura en los escritos que la defensa de Junqueras y Romeva presentarán esta semana, antes de que comience en los próximas días el juicio del «procés» en el Tribunal Supremo.
El escrito de 115 páginas de la defensa liderada por el abogado Andreu Van den Eynde, que ha avanzado «eldiario.es», la defensa apunta al anterior Gobierno de Mariano Rajoy y, en este sentido, remarca que el origen de esta causa es la «instrumentalización del proceso penal para la persecución de un movimiento que, pacíficamente, anhela un objetivo político legítimo en democracia».
Si bien el escrito admite que Junqueras y Romeva impulsaron el referéndum, remarca que esa fue la única ejecución «unilateral» del anterior gobierno de Carles Puigdemont.
En todo caso, los abogados de la defensa argumentan que la celebración de referendos es un acto que no está penalizado en el Código Penal.
Los letrados piden la absolución del delito de rebelión porque rechazan que hubiera violencia, algo que creen que es una invención de la Fiscalía, y señalan que Junqueras y Romeva «antes que independentistas, son demócratas y pacifistas».
En cuanto a la sedición, la defensa destaca que las concentraciones supuestamente tumultuarias previas al 1-O solo fueron fruto del ejercicio del derecho fundamental a la manifestación, sin estar «orientadas a impedir el ejercicio de funciones públicas o de la autoridad».
También rechazan que hubiera malversación, porque razonan que hubo un mandato ciudadano para celebrar un referéndum y destinar una inversión a este fin.
Los letrados vuelven a pedir que dejen a Junqueras y Romeva en libertad, porque consideran que de esta manera podrán tener un juicio justo.
