El gobierno de Colau participará activamente en los actos de la Diada

El primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Gerardo Pisarello, aseguró ayer que el equipo de Ada Colau participará «activamente» en los actos institucionales y populares de la Diada del 11 de septiembre que se convoquen para reivindicar los «derechos nacionales de Cataluña».

En declaraciones a los periodistas, Pisarello también indicó que el consistorio está estudiando la propuesta que les ha planteado la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) de convocar una consulta sobre la adhesión a esta plataforma soberanista de forma simultánea con otros municipios del área de Barcelona, como Badalona o Sabadell, si bien hasta otoño no prevé que se adopte ninguna decisión.

El primer teniente de alcalde indicó que el consistorio liderado por Colau participará «activamente» en los actos institucionales de la Diada de Cataluña y que «seguramente» también tendrá una «presencia activa» en las manifestaciones que haya en la calle.

«Nos parece que hoy tenemos más razones que nunca para poder reclamar los derechos nacionales del pueblo de Cataluña, porque estamos ante una situación de bloqueo en la que el PP ha tenido en los últimos años una actitud autoritaria y centralista que es inadmisible», indicó.

El primer teniente de alcalde también afirmó que le parece «interesante» la propuesta de la AMI de convocar una consulta simultánea en varios municipios del área de Barcelona para que los ciudadanos decidan si su localidad de adhiere a esta plataforma soberanista. Recordó que el equipo de Ada Colau es partidario de consultar a los ciudadanos sobre cuestiones que los vecinos consideren relevantes, por lo que no descartan la propuesta de la AMI, que están estudiando.

Rabell, poco «apelado» por la Diada

La postura de BComú constrasta con la de SíQueEsPot, la marca parlamentaria de la nueva izquierda catalana que, a través de su presidente, Lluís Rabell, asegura no sentirse «demasiado apelado, sino más bien rechazado» por la convocatoria de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) para manifestarse durante la Diada.

«No es un planteamiento unitario para avanzar en los derechos democráticos de Cataluña, sino para sostener una determinada opción política», argumentó ayer Rabell, quien reclamó a la ANC que trabaje para ampliar la base social del soberanismo y no sea excluyente. «A veces tenemos al enemigo en nuestra propia casa», añadió, ya que considera que las vías unilaterales «dejan de lado a parte de la sociedad».