El PP expedienta al alcalde salmantino que llamó «mamporrero» al presidente del Senado

El PP de Salamanca ha decidido abrir un expediente informativo al alcalde de Pajares de La Laguna , Juan Antonio Benito de Dios (PP), después de su incendiaria carta remitida al Senado en la que llega a calificar al presidente de la Cámara Alta, Pío García-Escudero, de «mamporrero de comunistas» en respuesta a un requerimiento para cambiar el nombre de una calle de su localidad por incumplir la Ley de Memoria Histórica.

La formación popular ha expresado su «profundo rechazo y condena» ante las palabras del regidor, que también llega a calificar al expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero , como «indigente mental» . Mientras, el también director de un colegio público de Salamanca señaló que si alguno de los términos empleados en la misiva ha ofendido a alguien «lo retiro y pido disculpas» .

«No dejan de ser la mayoría términos metafóricos o de varias acepciones», añadió antes de señalar que el texto «es un desahogo ante tanta miseria política, moral, económica y falsaria como estamos padeciendo los españoles en los últimos años». El alcalde considera «un exceso» que el contenido de la carta se haya puesto en conocimiento de la Fiscalía, al tiempo que afirmó que expresa «opiniones de carácter político» en las que, según defiende, no va «ni contra el presidente García-Escudero, ni contra el Senado».

Lo cierto es que su carta llega en respuesta a la firmada por el presidente del Senado en la que se le daba traslado de la petición del senador Carles Mulet para que retirara el nombre de la calle General Moscardó . Tras denominar a Zapatero como «el Rojo», Benito de Dios rebautiza la Ley de la Memoria Histórica como «Ley de Mentira Histórica, o ley de Memoria Histérica, o ley de Resentimiento Histórico» . También se despacha a gusto contra el senador Mulet, al afirmar que «pertenece a una pandilla de, salvo excepciones, vagos y maleantes, violentos y antisistema , delincuentes y matones, proterroristas y antidemócratas», escribe.

En lugar de atender a la petición recibida, el alcalde se revuelve contra todos. «Si la institución del Senado que usted preside no tiene otra cosa mejor que hacer y se dedica a perder el tiempo y los recursos que los ciudadanos se ven obligados a entregar son despilfarrados en asuntos como este, mejor será que esa institución se disuelva y nos devuelvan el dinero a los ciudadanos que lo generamos con gran esfuerzo, que es nuestro no vuestro», asegura en su escrito.

«Dígale a ese senador podemita que me indique los crímenes que ha cometido el señor cuyo nombre no debe, según él y sus adláteres, llevar la calle», responde el alcalde. Y contraataca así: «Yo sí le puedo dar a conocer a ese senador comunista la larga lista de crímenes y asesinatos, atentados y agresiones, crueldades y atrocidades, destrucciones e incendios, etc.., perpetrados por sus violentos y liberticidas correligionarios ideológicos en los años treinta del siglo pasado, que dicho sea de paso provocaron una guerra civil en España». El edil se despide con una cita de George Orwell que también incluye en el encabezamiento de la carta: «Ya sabe, para hacer cumplir las mentiras del presente es necesario borrar las verdades del pasado».