Herrera saluda a Mañueco ayer en las Cortes, minutos antes de que comenzase el pleno
Herrera saluda a Mañueco ayer en las Cortes, minutos antes de que comenzase el pleno - ICAL
Política / Congreso regional del PP

Mañueco, sobre la bicefalia con Herrera: «No será complicada»

Aunque dice que «no hubo vencedores ni vencidos» en el proceso de primarias, defiende que su proyecto es el «claro ganador»

Valladolid Actualizado: Guardar
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Aunque comparte con el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, que en el proceso de primarias «no hubo ni vencedores ni vencidos», Alfonso Fernández Mañueco quiso ayer enfatizar el hecho de que la candidatura que «yo encarnaba» resultó «claramente ganadora» en las votaciones del viernes. «A nivel personal, todos somos iguales», pero «hay un proyecto» que tuvo un respaldo «mayor», insistió el que será a partir del próximo 1 de abril nuevo presidente del PP regional. El también alcalde de Salamanca aprovechó además su presencia en la tertulia COPE-ABC para resaltar -sin que le interrogaran- que los populares son «el partido de la afiliación, de nadie más, independiente y ajeno a las presiones que puedan llegar desde todos los ámbitos -sin especificar a cuáles se refería-».

En todo caso, defendió que la diferencia de votos entre su opción y la que encabezaba Antonio Silván -prácticamente un 70 por ciento para él y algo más de un 30 para el leonés- no tiene relación con una supuesta división del partido porque «aquí no había corrientes organizadas, sino dos personas y dos proyectos y el respaldo de la afiliación a uno con más claridad que al otro».

Para Fernández Mañueco, ahora llega el momento de «analizar con detenimiento y hacer la lectura correcta» de los resultados «viendo todo lo que ha ocurrido estos días, las declaraciones que han salido en los medios, los posicionamientos -de nuevo sin decir de quiénes, aunque varios consejeros de la Junta se decantaron abiertamente por Silván y otros presidentes del partido, por él- y cómo han respondido ante estas situaciones los afiliados». En esta línea, consideró que «lo primero» que debe hacer es mandar «un agradecimiento a Antonio Silván, a él, por su campaña electoral, la de él, que ha sido clara, limpia y quiero agradecérselo a él».

Preguntado también por la recomendación de Herrera para que Mañueco apueste por una ejecutiva de integración, el salmantino consideró que él valora más «la cohesión» para conformar un equipo «contando con todos, con los que me han votado y también con los que no», dejando claro que el PP de Castilla y León «es de las mujeres y hombres que han participado en este proceso». Aunque admitió que quizás su trabajo «aún no se ve reflejado en los medios», aseguró estar «hablando con personas, con compromisarios, con representantes de distintos ámbitos territoriales y sectoriales del partido de manera discreta y prudente». Sin embargo, no avanzó nada respecto a ese supuesto pacto por el que Silván tendría ahora que ocupar el puesto de secretario general de la formación. «Todavía no estamos en esa fase», se defendió, afirmando también que «lo importante es el proyecto que queremos seguir y quién puede aportar con la máxima convicción».

Para conseguir que su mandato avance como él pretende, reiteró la necesidad de que la dirección regional debe funcionar «como un engranaje» con las provinciales y la nacional, una «tarea» a la que «invito a todo el mundo» y en la que los presidentes de cada provincia «van a tener una labor fundamental».

En referencia a si la bicefalia que protagonizará con Herrera va a suponer algún problema para él o para el propio partido, Mañueco negó la mayor al asegurar que «no será complicada». Según dijo, habrá que «buscar fórmulas» -sin concretar cuáles- asumiendo una de las que será sus nuevas funciones como presidente del Grupo Popular en las Cortes de Castilla y León. Tampoco se mostró preocupado por el posible distanciamiento que pueda existir entre la formación y la Junta de Castilla y León -lo institucional- tras un proceso en el que los consejeros que se han pronunciado lo han hecho a favor de su rival. «Habrá que hace el análisis y la reflexión y si hubiera distanciamiento o lo ha habido, haré todo lo que esté en mis manos para que haya mayor cercanía, entendimiento y diálogo», sentenció.

Tras insistir en que el partido «no está dividido» pese a los resultados cosechados en las primarias en provincias como Valladolid, Palencia, además de León, Mañueco citó la Parábola del Hijo Pródigo al señalar que «a quién hay que buscar primero es a quien está perdido» para inmediatamente después «agradecer» las muestras de apoyo «públicas y privadas» tanto de los que le apoyaron a él como a Silván «porque -repitió- yo quiero contar con todas las sensibilidades».

Más de un millar de whatsapps

Respecto a las «consecuencias» personales de su triunfo en las primarias, bromeó al señalar que en estos días ha contestado «mas de mil whatsapp», además de las «consabidas llamadas, mensajes sms y de facebook». A todos ellos les dio «una respuesta personal», a lo que dedicó «unas cuantas horas» que le han servido para ponerse ya en el papel del presidente del PP de Castilla y León al considerar que tendrá que «atender a todo el mundo, escuchar a unos y otros y tomar decisiones» cuando antes -con Juan Vicente Herrera al frente del partido- no era así para él. El regidor admitió sentir «la responsabilidad» del nuevo cargo, especialmente porque en los últimos 30 años los presidentes del PP en la Comunidad han sido el citado Herrera, José María Aznar y Juan José Lucas: «Esos nombres dicen lo que dicen en la historia del PP de Castilla y León y en la del nacional».

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