El marqués de Griñón, premiado por su compromiso con el mundo del vino y la gastronomía

Si Miguel de Cervantes hubiera vivido en nuestros tiempos, Carlos Falcó, marqués de Griñón, hubiera sido un firme candidato a formar parte de su célebre obra Don Quijote de la Mancha; dos de los personajes de esta novela, Alonso Quijano y Sancho Pancha representan el realismo e idealismo, valores que encajan a la perfección en la figura del también, presidente de la Academia de Gastronomía de Castilla-La Mancha.

Desde este viernes, a su amplio currículum se une un nuevo reconocimiento: el premio Gastroledo 2016. Un galardón por su aportación al mundo de la gastronomía y el vino que recogió de la mano de la concejal de Turismo, Rosana Rodríguez y del director del Seminario Permanente de Gastronomía, Educación y Salud (Spges) de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), Antonio Mateos, en el centro Cultural San Marcos.

El empresario que, asistió al acto acompañado de su pareja, Esther Doña, su hija, Sandra Falcó, miembros de su equipo y restauradores de la ciudad, entre ellos, Adolfo Muñoz, se mostró «muy ilusionado» con este premio de la ciudad que «acoge las raíces de su familia desde hace 700 años».

Durante su alocución, el marqués de Griñón hizo un recorrido por la historia de «dos productos milenarios», como son el vino y el aceite, que a su juicio, son «parte del ADN de la historia» y recalcó el importante papel que desempeñan los científicos en «en intentar mejorar la calidad de nuestra dieta que es la clave de nuestra salud».

Han sido muchos años de estudio y trabajo, a lo largo de los cuales ha adquirido conocimientos muy útiles que le han permitido poner en práctica técnicas como el riego por goteo o una diferente poda de viñas que, unido a los avances tecnológicos han permitido «la manera de elaborar el vino».

Quijote y Sancho

Por su parte, el director del seminario realizó una sutil comparación entre el marqués de Griñón y los personajes del Quijote, novela de Miguel de Cervantes. «El marqués es un Quijote que se hace Sancho y un Sancho que no renuncia a ser Quijote, ambos integran la pasión por los ideales como Falcó, que ha luchado como el Hidalgo Caballero contra lo establecido y ha sido un innovador en su época en cuanto al sector del vino, como Cervantes lo fue con su creación literaria», explicó.

En esta línea, añadió que las iniciales I+D+i pueden atribuirse a Falcó como un hombre «inquieto, con discreción e influyente» que, además, «no ha dejado de indagar» en el mundo de la gastronomía y que, encima, ha contribuido a «entender la cultura gastronómica de la región y de España».

Finalmente, la edil de Turismo afirmó que estar con Carlos Falcó es estar «con un trozo de la historia de España» y destacó su «disposición» y «compromiso» para ayudar en cuanto se le ha solicitado.

Este acto forma parte de las jornadas Gastroledo 2016, organizadas por el Ayuntamiento en colaboración con la UCLM, que incluyen entrevistas, ponencias, degustaciones y clases magistrales de grandes chefs como Joan Roca, Martín Berasategui, Pepe Rodríguez Rey e Iván Cerdeño, entre otros.