Enrique Rodríguez Grau-Bassas es el presidente de los veterinarios de Las Palmas. Buena parte de su agenda se basa en convencer a las autoridades que es «incuestionable la responsabilidad de las autoridades municipales» atender de forma correcta a las mascotas.
«Lo único que hay son prohibiciones de llevar al animal a cualquier lado, con lo cual es un círculo vicioso porque si no lo puedes sacar no lo educas y los perros no educados no son bien recibidos», advierte el jefe del Colegio de Veterinarios de Las Palmas.
Agrega que no todo el mundo sale con su perro a pasear por la calle «y eso da lugar que haya gente que tenga animales en mal estado o se maltraten sin tener una posibilidad de control sobre eso».
Por otra parte, afirma que «la mayoría de los municipios no destinan recursos a sanciones ni a valorar el estado en que se encuentran los animales», denuncia. El presidente de este colectivo profesional explica que, por un lado, «se tiene la necesidad de legislaciones y sanciones», y por otro, de «educación», y que la primera «es una cuestión local, insular o gubernamental, pero es competencia de los políticos».
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