Aragón suspende por segundo año la Vaquilla de Teruel, los Sanlorenzos de Huesca y el Sanroque bilbilitano

Por segundo año consecutivo, Aragón no celebrará fiestas populares en julio y agosto en ningún punto de la región. El Gobierno aragonés ha decidido anular todos los festejos locales hasta el 31 de agosto, como mínimo . A partir de ahí, dependerá de cómo evolucione la pandemia del Covid. La medida ha se ha hecho oficial este jueves desde el Ejecutivo autonómico.

La decisión tumba por segundo año consecutivo festejos tan multitudinarios como la Vaquilla de Teruel , que se celebra tradicionalmente a principios de julio; las fiestas oscenses de San Lorenzo , que tienen lugar a principios de agosto; las fiestas de San Roque de Calatayud (Zaragoza), que se celebran a mediados de agosto; y las del Cipotegato de Tarazona , que tienen lugar a finales de ese mes.

El acuerdo lo ha notificado el Gobierno de Aragón tras la reunión que mantuvo este jueves con representantes de la Federación Aragonesa de Municipios, Comarcas y Provincias (FAMCP), las diputaciones provinciales y los ayuntamientos de las capitales de Zaragoza, Huesca y Teruel. Por parte del Gobierno regional acudieron a la reunión las consejeras de Presidencia y de Sanidad, Mayte Pérez y Sira Repollés , respectivamente.

Con la decisión adoptada este jueves se mantiene la esperanza, por tanto, de que este año pueda celebrarse la mayor cita festiva de Aragón, las fiestas del Pilar de Zaragoza, que tienen su día grande en la festividad de la Patrona, el 12 de octubre. Dependerá de cómo evolucione la situación sanitaria a partir del 31 de agosto. Y lo mismo para el resto de fiestas tradicionales que tienen lugar en Aragón más allá del 31 de agosto, entre las que se incluyen las fiestas patronales de Calatayud en honor de la Virgen de la Peña.

La suspensión de las fiestas supone un golpe añadido a la actividad económica y, en particular, al sector de la hostelería . Estos festejos, en particular los más multitudinarios, constituyen una fuente de consumo que inyecta renta en las economías locales de ciudades como Teruel, Huesca, Calatayud o Tarazona, las cuatro urbes que acogen los festejos de mayor relevancia que tienen lugar en Aragón entre los meses de julio y agosto.

La consejera aragonesa de Presidencia ha indicado que la suspensión de las fiestas populares se ha acordado de forma consensuada entre la Administración autonómica y los entes locales. Considera que la decisión adoptada en este momento, a principios de mayo, da «seguridad a los alcaldes», según han indicado fuentes del Gobierno regional. Mayte Pérez destaca que deben seguir suspendidos «todos los actos en los que no se puedan controlar los aforos» .

«La prudencia que debe rigiendo el comportamiento individual de los aragoneses», indicó la consejera de Presidencia del Gobierno aragonés al término de la reunión en la que se ha acordado suspender todas las fiestas populares en Aragón hasta, como mínimo, el 31 de agosto incluido.