Un Xacobeo muy diferente

El silencio de Compostela y sus calles vacías nos anuncian su atípico inicio de año santo, tanto, que por primera vez en la historia durará dos años, lo que supone una doble inyección económica para este sector tan castigado por la pandemia. Muchos empresarios tienen esperanza por la ayuda. Muchos de ellos tienen muchos Xacobeos a sus espaldas. Este año hay pocos peregrinos en la Plaza del Obradoiro, son los propios gallegos los que acuden a la Puerta Santa. Todos confían en la fuerza del apóstol para afrontar con esperanza uno de los años más difíciles de la historia.-Redacción-