El PP dice que Sánchez está «desbordado» y Cs da por agotada la legislatura
Montserrat alerta de que el Gobierno está desnortado y Rivera insiste en que hay que convocar elecciones
La confianza de la oposición en que Pedro Sánchez logre agotar la legislatura al frente del Gobierno es cada día menor. Los dos principales partidos que no apoyan al Ejecutivo, PP y Ciudadanos, alertaron ayer de la situación que a su juicio vive España como consecuencia de la debilidad parlamentaria del Gobierno y las dificultades que está teniendo para afrontar las crisis que han estallado en los últimos meses. Tanto los de Pablo Casado como los de Albert Rivera aseguran estar preocupados por la manera en que Sánchez está afrontando cuestiones como la crisis migratoria, la huelga de los taxistas o el desafío secesionista catalán.
El presidente de Ciudadanos hizo ayer en el Congreso de los Diputados el balance de una legislatura que ya da por agotada . «Se acabó. Esta legislatura está ya en sus minutos de descuento», aseguró, y advirtió de que el cambio en el Ejecutivo surgido de la moción de censura ha llevado a España a «depender de los separatistas, de los populistas y de los que quieren romper España ».
Rivera, muy duro en sus declaraciones, acusó a Pedro Sánchez de desatender el «clima de intimidación » que, según explicó, se vive en Cataluña. «Tenemos una situación de intimidación a jueces, cargos públicos y catalanes que defienden la ley. Y debido a la sociedad entre Sánchez y los separatistas, el Gobierno mira para otro lado y no defiende a estos catalanes».
El líder de Cs volvió a pedir que se aplique el artículo 155 de la Constitución en «algunas materias para que no suceda lo que estamos viendo». «No vale ser Gobierno solo para hacerse fotos y coger el avión oficial. Sánchez se esconde ante los principales problemas de España. Tiene que pisar la realidad. Se acabó. No hay techo de gasto. Estamos en manos de Torra. El Gobierno es débil , sin mayorías, sin votos, sin escaños. Tiene que convocar elecciones para tener un Gobierno fuerte y que España no esté en manos de Puigdemont, de Pablo Iglesias y de Torra», manifestó Rivera.
Más allá de Cataluña
«Sánchez está arrodillado ante el independentismo catalán , que es insaciable y su único objetivo es romper Cataluña y España», advirtió la exministra Dolors Montserrat , que ayer se estrenó como la nueva portavoz del Grupo Popular en el Congreso recordando que su partido estará «vigilante» respecto a la reunión de la Comisión Bilateral entre el Gobierno y la Generalitat.
Ante este «Gobierno débil y desnortado », Montserrat anunció que el PP va a hacer una «oposición constructiva» que incluirá «potentes iniciativas» a partir de septiembre, entre ellas las ya anunciadas por Casado para modificar el Código Penal y volver a penalizar como delitos la sedición impropia y la convocatoria ilegal de referéndums.
La portavoz también anunció una reforma de la Ley de Símbolos para adaptarla a la reciente sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, de modo que «no tenga que ser cada concejal quien se queje en su municipio», sino que sea la norma estatal la que «vele por la neutralidad de los espacios públicos ». Rivera advirtió en este sentido de que si el Ejecutivo «no retira los símbolos ilegales presentes en las plazas, las playas y las instituciones, lo haremos nosotros». «El espacio público es de todos y tiene que ser neutral. Basta ya de que los catalanes constitucionalistas no podamos compartir el espacio público».
Pero las críticas de Cs y del PP van más allá de la cuestión catalana. Ambos grupos pidieron ayer la comparecencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska , para que dé explicaciones sobre el acercamiento de los presos de ETA a cárceles vascas y sobre la gestión del Gobierno en la crisis migratoria.
Ante el anuncio de que el acercamiento arrancará en las próximas semanas, el PP quiere saber si Grande-Marlaska, que apoyó la política de dispersión durante su etapa como juez de la Audiencia Nacional, comparte esta decisión del Ejecutivo que le « impone » Sánchez y que, según Montserrat, es el «precio a pagar» por el apoyo del PNV a la moción de censura. « Tenemos un Gobierno débil sometido a los nacionalistas vascos », alertó.
A juicio del PP, el Gobierno «está desbordado, desnortado» y es incapaz de poner en marcha «las políticas necesarias para solucionar una gran crisis » como la migratoria. Montserrat reciminó a Sánchez que su primera visita como presidente no haya sido al «país vecino y hermano», Marruecos , con quien, explicó, «siempre se ha trabajado» en esta materia. «Ya alertamos a Pedro Sánchez de que estas medidas provocarían un efecto contagio que las mafias aprovecharían». Además del titular de Interior, el PP también quiere que comparezca la ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio -también por la crisis migratoria- y el de Fomento, José Luis Ábalos , por la huelga de los taxistas.
La nueva portavoz aprovechó su estreno para anunciar el registro de la reforma electoral que había propuesto Pablo Casado para que en los ayuntamientos gobierne la lista más votada. Los populares proponen que se otorgue la mayoría absoluta de concejales a quien gane con al menos el 35 por ciento de votos y cinco puntos de ventaja sobre el segundo, o con al menos el 30 por ciento y diez puntos de diferencia. De no darse esos supuestos, se celebraría una segunda vuelta a la que pasarán los partidos que hayan obtenido el 15 por ciento de los votos. Tras esa segunda vuelta, se daría la mayoría absoluta de concejales a quien haya logrado el 40 por ciento de los apoyos o quede primero con al menos siete puntos de diferencia sobre el segundo. El resto de los escaños se repartiría según los resultados de la primera vuelta.
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