María Dolores, la esposa de Juan Carlos, al fondo, rompiendo a llorar
María Dolores, la esposa de Juan Carlos, al fondo, rompiendo a llorar - NACHO GARCÍA/AGM

«El Guacho», supuesto autor del apuñalamiento en Murcia: «¡Os voy a matar a todos!»

Una grabación del hospital de Molina demuestra que el fallecido no agredió al presunto homicida y que este le acuchilló en el pecho por sorpresa

Molina de Segura Actualizado: Guardar
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«El Guacho» no se vino abajo tras ser arrestado el martes por la Policía Local de Molina de Segura como supuesto autor de la muerte a puñaladas de Juan Carlos M. P., de 46 años. Pese a su juventud, apenas 19 años, estuvo lejos de achantarse. Fuentes de la investigación afirman que mostró una actitud «chulesca», e incluso llegó a retar a los policías: «Cuando yo quiera os diré dónde está el cuchillo».

También justificó el ataque contra el vecino de Archena que trató de mediar cuando «El Guacho» entró en el Hospital de Molina con la supuesta intención de atacar a una joven que se había peleado con su hermana menor. «Pensé que ese hombre era familiar de la otra chica», afirmó el joven Ramón M.

J.. «Creí que venía a pegarme y me tuve que defender».

La grabación de las cámaras de seguridad del centro hospitalario, que ya está en poder del Juzgado de Instrucción número 1 de Molina, desmonta su «teoría» de que actuó en defensa propia. «El vídeo deja claro que la víctima se acerca sin ánimo de agredir; solo quería mediar», afirman las citadas fuentes.

En las imágenes se aprecia cómo el joven entra corriendo en el servicio de urgencias, tras enterarse de que su hermana, de 17 años, se había peleado con otra joven en el parque del barrio de Fátima y que había acudido al hospital a solicitar un parte de lesiones. Un empleado del centro que ha visto las imágenes relató a 'La Verdad' que «se ve a un grupo de tres o cuatro chicas en el pasillo del servicio de Urgencias, dando sus datos en el mostrador de información, y llega «El Guacho» y empieza a pegarle puñetazos a la chica».

No cruza palabra con la joven, solo quiere supuestamente vengarse de ella por haber agredido a su hermana. «Entró corriendo y gritando: "¡Os voy a matar a todos!". La chica cae al suelo y se lo quita de encima como puede e inmediatamente saca un cuchillo». Para más señas, uno de cocina, de 15 centímetros de hoja, con mango de madera, y que «El Guacho» llevaba escondido dentro del pantalón, en la zona de la ingle. Justo en ese momento entra en escena Juan Carlos, que está en el mismo pasillo aguardando a que los médicos le informen de la operación a la que está siendo sometido su hijo, de 13 años, por una lesión en el brazo.

«El hombre se abalanza sobre él para separarlo de la chica, hay un forcejeo y "El Guacho" se va a por él». Mientras tanto, la joven coge un extintor del pasillo para tirárselo, pero el chico ya ha apuñalado a Juan Carlos. «Entonces 'El Guacho' se dirige hacia ella y le quita el extintor».

Es en ese momento cuando un vigilante de seguridad se interpone y evita que vuelva a atacar a la chica, por lo que el agresor sale huyendo de Urgencias y se pierde corriendo por la calle Caminante. «El personal de seguridad evitó más víctimas, porque siguió lanzando cuchilladas», afirmó ayer Francisco Menchón, director adjunto del hospital. «El herido llegó a entrar por su propio pie a una consulta, pero no se pudo hacer nada por su vida».

Juan Carlos murió mientras operaban a su hijo pequeño. «El cirujano no sabía cómo decirle al niño lo que había ocurrido», afirmaba con amargura Menchón. Fuentes de la investigación confirmaron que «una de las puñaladas penetró en la parte derecha del tórax y fue mortal».

La mujer de la víctima, María Dolores, estaba en la sala de espera y entró en shock tras presenciar la muerte su marido, con el que solo 24 horas antes había estado celebrando su 46 cumpleaños.

«El Guacho» esquivó el fuerte despliegue de Policía Local y Policía Nacional escondiéndose en el instituto Francisco de Goya. También tuvo la sangre fría de hacer una parada en su huida para meter el cuchillo en una bolsa y tirarlo a un contenedor situado a 200 metros del hospital. Los investigadores lograron encontrarlo tras una ardua búsqueda.

Aunque los padres de «El Guacho» aseguraron que estaba dispuesto a entregarse, la Policía Local lo pone en duda. En primer lugar, porque «el sospechoso viajaba en un coche agachado en la parte de atrás para no ser visto». Y en segundo lugar, porque los policías empezaron a hacer controles a todos los vehículos cuando detectaron que hasta el barrio de Fátima habían llegado, procedentes de Cartagena, miembros del clan de «Los Guachos». «A lo mejor querían llevárselo a "Las Seiscientas"». De momento, al único sitio que irá es a los juzgados. Hasta allí lo conducirá hoy la Policía Nacional acusado de un supuesto delito de homicidio.

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