La familia del general Sanjurjo desmiente al alcalde de Pamplona

La polémica en torno a la exhumación de los restos de los generales Mola y Sanjurjo del Monumento a los Caídos de Pamplona entró ayer en una nueva fase con el enfrentamiento entre las familias y el alcalde de Pamplona, Joseba Asirón.

La hija y los nietos del general José Sanjurjo emitieron un comunicado a través de la agencia EFE en la que desmentían las palabras de Asirón del miércoles. El alcalde de Pamplona había afirmado que antes de tomar la decisión de exhumar los restos de las personas que se encuentran enterradas en el Monumento a los Caídos de Pamplona había informado a las familias «con el máximo respeto» de su decisión. Ayer mismo, el portavoz de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona, Enrique Maya, afirmó que el alcalde le había transmitido que la decisión contaba con el apoyo de las familias.

Pues bien, la familia de Sanjurjo aseguró en un comunicado que «no ha tenido constancia expresa en ningún momento y de forma oficial de la iniciación del expediente administrativo para realizar semejante vejación». Al mismo tiempo, aseguraba que no había dado su consentimiento para la exhumación de los restos.

El texto de la familia Sanjurjo advirtió de que la Ley Foral, 33/2013 de Memoria Histórica a la que se agarra el Ayuntamiento dirigido por Bildu, «no contiene un solo artículo que autorice la barbarie que supone exhumar a los fallecidos del bando nacional y, menos aún, cuando se encuentran sepultados en lugares sagrados».

Lejos de buscar la reconciliación y aclarar el asunto, el alcalde de Pamplona tachó de «gerifalte fascista» tanto a Mola como a Sanjurjo. Si buscamos la palabra «gerifalte» en el diccionario de la Real Academia nos encontramos en la quinta acepción que se trata de «jefe o autoridad», pero en sentido irónico, es decir, que empleó la «burla fina y disimulada», según el mismo diccionario.

El grupo municipal de UPN, por su parte, pidió los informes técnicos que avalaron la decisión de exhumar los cadáveres para «saber si es cierto» lo expuesto por el alcalde Joseba Asirón y para «saber lo que quieren las familias» de las personas enterradas. Según su portavoz, Enrique Maya, «no me fío» de lo que diga el equipo de gobierno municipal porque «puede haber gato encerrado». «Estaremos atentos para saber si todo lo que ha afirmado es verdad», concluyó.