Varios vecinos captan el momento preciso en el que la excavadora se vence sobre la pared que trataba de derribar. Por causas que aún se investigan, la pala acaba impactando contra el techo de este supermercado. Los clientes huyen despavoridos, por suerte ninguno estaba en la zona exacta donde cayeron los cascotes. Hoy allí arreglan los desperfectos y limpian uno a uno todos los productos. El único destrozo de un accidente que, por poco, no acaba en tragedia.-Redacción-
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