Pedro Sánchez, ex secretario general del PSOE
Pedro Sánchez, ex secretario general del PSOE - ÓSCAR DEL POZO

Los críticos con la gestora del PSOE defienden a Sánchez

Susana Díaz rompe su silencio y asegura que no es el momento de un proyecto «personalista»

Madrid Actualizado: Guardar
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Los todavía partidarios de Pedro Sánchez volvieron ayer miércoles del puente festivo de Todos los Santos defendiendo en tromba al ex secretario general del PSOE tras el error de su entrevista el domingo en «Salvados», donde no dejó títere con cabeza y dio argumentos de todo tipo a quienes propiciaron su caída. Esto lo reconocen hasta los más sanchistas que, en privado, intentan disculpar su «desahogo» en clave humana, no política.

Si el martes abrió fuego el secretario general de los socialistas de Castilla y León, Luis Tudanca, calificando a Sánchez de «indispensable para la reconstrucción del PSOE», aunque no llegara a decir que apoyará su reelección como secretario general, ayer le siguieron la secretaria general del PSM, Sara Hernández, quien sí mostró su «apoyo absoluto a la candidatura, aún no formalizada, de Pedro Sánchez»; la líder del PSOE en Melilla, Gloria Rojas, que respalda el diálogo con Podemos defendido por un Sánchez «claro y sincero» en una «muy buena entrevista»; y el secretario general de los socialistas alaveses, Txarli Prieto, quien señaló que el PSOE «necesita un congreso cuanto antes», como defiende Sánchez, y que él «sería un excelente candidato» para volver a liderar el partido, ya que «tiene claridad de ideas que conectan muchísimo con una mayoría» de la militancia.

Que, pasado un mes de la caída, haya barones en el partido saliendo en defensa de que vuelva a intentarlo dice mucho del trabajo que le queda por delante a la gestora que dirige provisionalmente el PSOE y a su presidente, Javier Fernández. Están unidos codo con codo a los barones de más peso del partido, Susana Díaz, Guillermo Fernández Vara, Emiliano García-Page, Javier Lambán y Ximo Puig, para «pasar página» cuanto antes a la etapa Sánchez, pero va a requerir tiempo: las sanciones a los 15 diputados que no se abstuvieron en la investidura de Mariano Rajoy, y la negativa de Margarita Robles a renunciar a la Presidencia de la Comisión de Justicia del Congreso. Anoche se comunicó la sustitución de Susana Sumelzo por Óscar Galeano como coordinador de los parlamentarios de Aragón.

Ayer, Susana Díaz advirtió al ex secretario general, a quien no nombró, que ahora «no es el momento de proyectos personalistas» sino de «reconstruir un proyecto reconocible», autónomo del PP y de Podemos. En ese sentido, puso como ejemplo la situación en Andalucía, donde «la derecha está en la oposición y Podemos, como tortolitos del PP, haciéndole oposición al Gobierno», informa Stella Benot.

Precisamente ayer el alcalde de Vigo, Abel Caballero, anunció que él apoyará a Díaz como sucesora de Sánchez. Mientras, el castellano-manchego García-Page avisó a éste que si quiere volver a liderar el partido «hable bien de todos los compañeros». Aseguró que Sánchez «trabaja para Podemos», y que la entrevista fue «clarificadora»: tenía un pacto secreto con los independentistas de ERC para ser investido.

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