Ya se las ha visto procesionar hace un mes. Con unos inviernos cada vez más cálidos, estas orugas bajen al suelo antes de la primavera, con el consiguiente peligro para las personas, aún sin contacto directo. Estos meses hay que evitar caminar entre pinos. Y protegernos. Especial cuidado hay que tener con los niños y los perros. Es muy importante tratar esta plaga a tiempo para que esta procesión no acabe en una inesperada penitencia.-Redacción-
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión