Lo que iba a ser un tranquilo de día de playa se convirtió en una persecución de película. Ha ocurrido en la playa de Melicena, en Granada. La llegada en lancha de dos narcos sobresaltó a los bañistas, quienes no dudaron en perseguirlos y en colaborar con la Guardia Civil en su detención. Los delincuentes portaban en su embarcación una veintena de fardos de hachís que pesaban alrededor de 800 kilos.
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