Educación: el pacto necesario que nunca llega

«Una sociedad que no apueste por una educación de verdadera calidad, lo pagará muy caro». Así de contundente se muestra Luis Rey, único español miembro del consejo fundacional de la organización Bachillerato Fundacional, tras escudriñar los programas electorales de PP, PSOE, Ciudadanos y Podemos. «El desempleo y la emigración de nuestros jóvenes más formados es solo la primera de esas facturas. O se arregla o vendrán otras, y aún peores: porque los demás países están poniendo sus sistemas educativos al día, mientras nosotros nos enzarzamos en discusiones bizantinas y hacemos de nuestra educación lo que Penélope con su paño», advierte este experto. Estabilidad normativa, autonomía de los centros, formación permanente de sus profesionales; y financiación suficiente, son las cuatro grandes carencias del sistema español, a juicio de Rey.

Y en la universidad reclama la reforma de la gobernanza y una financiación adecuadas.

Sin duda, mientras el cambio del partido en el Gobierno se traduzca en ese tejer y destejer de leyes educativas, el sistema educativo español seguirá haciendo aguas. En ello coinciden todos los agentes implicados. Un pacto por la educación basado en objetivos coherentes y no en intereses partidistas es el primer ladrillo para construir un sistema educativo bueno y estable. El PP parece haberse dado cuenta tras la fuerte contestación que recibió la Ley Wert y es la primera medida que propone, pero el PSOE sigue empeñado en poner la zancadilla a la educación española al centrar sus promesas en derogar todo lo que acaban de aprobar por los populares. «Las propuestas socialistas son las que más me han decepcionado. Son marcadamente reactiva. No me parecen muy bien fundadas y tienen una credibilidad lastrada por lo que han hecho en el pasado (¿nos vamos a creer ahora esa defensa de la educación laica después de tantos años manteniendo el concordato?», se pregunta Antonio Villar, investigador de la OCDE en temas educativos y catedrático de Economía de la Universidad Pablo de Olavide.

Con el PP tampoco es condescendiente. «Tiene poco margen para proponer novedades o alternativas creíbles porque acaba de aprobar una ley educativa contra todos los demás y ha realizado un conjunto de recortes de los que nos va a costar recuperarnos», reflexiona. Villar, en cambio, pone en valor las propuestas de Ciudadanos. «Me parecen que son las mejor articuladas, con medidas concretas y bien pensadas», señala, antes de tildar de «esperable» el programa de Podemos.