Iglesias se viste de líder de la oposición en su mitin más multitudinario

Fue el mitin más multitudinario, y sin embargo Pablo Iglesias se deshizo del tono más combativo y propio de una contienda electoral como la que se juega para ponerse el traje de hombre de Estado. Y de líder de la oposición. «Hay momentos en los que uno tiene que hablar desde la responsabilidad de Estado», arrancó para referirse a los atentados en Kabul contra la embajada española. E incluso se atrevió a pedir al presidente del Gobierno la comparecencia del ministro de Exteriores en el Congreso «para que dé a las fuerzas políticas representadas en el Parlamento detalles e información sobre la situación en Afganistán» y presente medidas que refuercen la seguridad de las embajadas. «Para eso este Gobierno contará con nuestra lealtad», indicó.

El líder de Podemos volvió a aquellos orígenes en los que se reivindicaba como única alternativa al PP y sólo mencionaba al PSOE para ningunearlo. En Zaragoza, ante un aforo de más de 7.000 personas, Iglesias advirtió este sábado a Pedro Sánchez de que «ser presidente del Gobierno no es mirarse mucho al espejo para ver si te sienta bien la americana» y, ya desde el inicio, señaló que iba a hablar con calma y tranquilo, ahora que «se les notan los nervios a los que gritan» y «elevan el tono e insultan demasiado». «Se les empieza a notar que su tiempo se acaba», indicó.

«Señor Mariano Rajoy, vamos a gobernar, nosotros sí, en serio», advirtió al líder del PP utilizando su propio eslogan de campaña. «Su legado son dos palabras que rompen la convivencia de un país: corrupción y desigualdad», insistió. Y fue más allá: «No es a ustedes a quien les duele la corrupción, sino a los ciudadanos de nuestro país. Además de llorar lágrimas de cocodrilo se pueden tomar medidas, como acabar con las puertas giratorias, que acaben de una vez con la impunidad». En ningún momento alteró ese tono relajado que había prometido, y criticó a Mariano Rajoy por instalarse en el «no sabe, no contesta». «Y lo entiendo, porque cada vez que contesta, los ciudadanos sienten pudor de ver que alguien así puede ser presidente del Gobierno», se jactó.

También hubo recado a Ciudadanos, aunque, como ocurrió con Pedro Sánchez, sin que ni siquiera mencionara a partido o candidato. «Alguien que aspira a ser presidente del Gobierno no puede copiar en el examen», señaló, en alusión al programa del partido de Albert Rivera.

Un ex-Jemad en un mitin

La caravana de Podemos ha llegado este sábado a Zaragoza, donde el equipo estatal ha estrenado a uno de sus fichajes estrella, el ex Jemad Julio Rodríguez, número dos al Congreso por la provincia. El que se ha convertido en uno de los mítines más multitudinarios de Podemos en campaña —alrededor de 7.000 personas han inundado el Pabellón Príncipe Felipe—, ha contado con la intervención de Rodríguez, que nada más comenzar ya ha advertido que no es «experto en mítines».

El ex Jemad ha explicado por qué decidió entrar en política: «Di este paso porque soy un patriota y en este momento crucial tenemos que aportar todos nuestro granito de arena. Y el mío era dar este paso». El que fuera máxima autoridad militar tras el Rey ha defendido que «hay gente que entiende el patriotismo como mostrar apego a la bandera». «Está bien tener apego a los símbolos, pero para mí patriotismo es lo que hace Podemos, defender a la gente. Uno es patriota cuando se dedica a rescatar a la gente y no a los bancos».

«Me considero de una generación que se entusiasmó con el paso de la dictadura a la democracia y que estuvo dos décadas anestesiados y a la que Podemos le ha devuelto la ilusión», ha concluido Rodríguez, que ha entonado aquello de «sí se puede» entre sonoros aplausos.

El líder de Podemos en Aragón y una de sus caras más visibles, Pablo Echenique, ha tirado de humor para señalar que, dado el aforo, lo próximo iba a tener que ser «La Romareda». Ya desde el inicio, advirtió de que sería «breve», que quería dejar todo el espacio posible al ‘otro Pablo’, el candidato de Podemos.

«Algunos no han entendido de que esto no va de siglas y se aferran a sus carnés. Esto va de la gente decente, no de formaciones políticas por muchos años que tengan», ha espetado Echenique, convirtiéndose así en el primero en dirigir sus palabras a IU —aunque sea indirectamente— en los mítines de la caravana estatal. «Gobernar y no dejar a nadie atrás no es solo compatible, sino que es lo mismo», ha defendido el líder aragonés, en alusión a los alcaldes y alcaldesas de candidaturas en las que se incluía Podemos. «Este 20 de diciembre, vuestro país os vuelve a necesitar». «Responsabilidad porque este es un momento crucial, confianza e ilusión» son los tres pilares con los que Echenique ha apelado al voto de los indecisos que, según cree, se han acercado hasta este mitin para tratar de convencerse.

El cabeza de lista de Podemos en Zaragoza, el profesor Pedro Arrojo —Perico, en los cánticos de los asistentes al mitin— ha dicho que Podemos es toda una «confluencia social y política» y que especialmente el 15-M ha dejado en la formación su sello. «Los jóvenes nos despertaron a la esperanza de nuevo en la política», ha indiciado.

Para Podemos, el primer diputado en Zaragoza está prácticamente asegurado a tenor de las encuestas. No así el segundo, por lo que el flamante ex Jemad podría quedarse fuera del Congreso. Fuentes de Podemos aseguran que, de obtener un único asiento en la Cámara Baja, Arrojo no renunciará al mismo para cedérselo a Rodríguez. «Algo sabemos en Aragón de dar la vuelta a las encuestas», ha dicho Echenique, ahuyentando el fantasma de que alguno de los dos se quede fuera.