Rivera pasa junto a los escaños de Soraya Saénz de Santamería y Mariano Rajoy
Rivera pasa junto a los escaños de Soraya Saénz de Santamería y Mariano Rajoy - Jaime Garcia
Rajoy inicia hoy el diálogo

Ciudadanos asume negociar con Rajoy pero quiere involucrar al PSOE para evitar al PNV

La Ejecutiva de Rivera apuesta en pleno por no entrar en un Gobierno del actual presidente y no buscará un acuerdo sin participación del PSOE

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El presidente del Gobierno se propone empezar hoy mismo los contactos con las demás fuerzas políticas para negociar un acuedo que permita formar un gobierno lo antes posible. Al término de su participación en la cumbre informal de Bruselas de la que ya ha sido excluido el Reino Unido, Rajoy dijo que cree que es de «sentido común» iniciar cuanto antes este proceso que le gustaría que desembocase «en un acuerdo amplio» porque daría seguridad para las grandes decisiones que hay que tomar en los próximos meses, empezando por elaborar el presupuesto de 2017. «Si es posible un gobierno estable de amplia base parlamentaria gobernaremos con los votos que nos han dado los españoles. A partir de mañana (por hoy) empezaré a hablar» con los demás partidos, explicó sin hacer referencias concretas a ningún interlocutor.

Rajoy no ignora que no han desaparecido las dificultades y que en cualquier caso «se necesita una predisposición de las fuerzas políticas» pero si detecta que la hay, entonces nombrará una comisión negociadora, encargada de «incidir en los puntos en los que podemos estar de acuerdo» en lugar de aquellos en los que el acuerdo no será posible. En principio, la propuesta abierta que hizo en diciembre sobre los aspectos en loso que cree que se puede lograr un terreno de convergencia «sigue en vigor»

Y en todo caso, «lo más importante es tener la voluntad de salir de esta situación» algo a lo que cree que han contribuido las segundas elecciones y en cierto modo descartó que vuelva a producirse la misma situación que entonces y que los posibles interlocutores continuen negándose a hablar con él «porque entonces si que sería una situación verdaderamente preocupante».

Lejos aún de los que piensa Rajoy, Ciudadanos va a intentar mantener su estrategia de presentar a Mariano Rajoy como factor disuasorio para su entrada en el Gobierno. Existe consenso interno en la dirección del partido que encabeza Albert Rivera en sostener el rumbo que la Ejecutiva tomó «sin divisiones» el pasado lunes, según relatan miembros de la dirección.

En el partido naranja existe malestar por el rechazo que desde el PSOE y el PP han planteado a su propuesta de abrir una mesa de negociación a tres. Ayer celebraban la decisión del presidente en funciones de iniciar ya los contactos, y aseguran que irán «a escuchar». Pero tienen claro que «el único pacto que sirve para desbloquear la legislatura es en el que esté el PSOE». Así lo asegura el número dos del partido, José Manuel Villegas, que apunta directamente a los socialistas: «se equivocan si no se sientan en una mesa a hablar».

Villegas advierte que en esa negociación, que creen que debería estar precedida de un encuentro de líderes, ellos van a plantear sus exigencias. Una de ellas es que Rajoy dé un paso atrás. Y si ésta se cumpliese Ciudadanos ya ha manifestado que podría incluso apuntalar la gobernabilidad formando parte del Gobierno. Si es Rajoy quien lo lidera, ese grado de vinculación está descartado. «Estaremos en la oposición», subrayó el martes Rivera. Pero en la retórica de Ciudadanos «estar en la oposición» no es incompatible con apoyar una investidura a cambio de una hoja de ruta reformista. Así funcionan por ejemplo en la Comunidad de Madrid y en Andalucía.

Es cierto que para Ciudadanos es importante la salida de Rajoy, pero también son conscientes de que los resultados electorales dejan poco margen. «El quién no es importante», señala Miguel Gutiérrez, secretario general del grupo durante la anterior legislatura. «Cuando llegue ese momento se verá», responde al ser cuestionado sobre si se podría apoyar a Rajoy en caso de que aceptase sus exigencias en materia de regeneración y otras muy importantes para Ciudadanos, como la ley electoral o el pacto educativo.

Un acuerdo con el PSOE

Insisten no obstante en que «creemos que no puede ser Rajoy» quien abandere ese «nuevo tiempo político», señala Gutiérrez, que recuerda que en otros lugares como la Comunidad de Madrid «ha cambiado a las personas», lo que en este momento sería crucial para el acercamiento. Pero asumiendo que debe ser Rajoy quien en estos momentos debe liderar la negociación, Rivera le volverá a trasladar esa mesa de negociación de ambos partidos junto al PSOE como condición para cualquier negociación. Lo dejaba ayer claro en el Congreso el portavoz parlamentario, Juan Carlos Girauta: «Si el qué ( el contenido) es continuista» y no incorpora «las reformas que el país necesita iremos a la oposición», apuntó Girauta, que dejó claro que si se aceptan una serie de medidas fundamentales para Ciudadanos «entonces hablaremos del quién (el candidato)», y no obstante habría que esperar a ver «qué agenda presenta y cuáles son los ejes de la legislatura».

Pero Girauta sí confirmó que Ciudadanos no contempla el escenario de unas terceras elecciones. Y ya sea con su participación o sin ella –«otra opción es que se pongan de acuerdo solo PP y PSOE»– cree que la legislatura saldrá adelante. «Sin ese entendimiento no va a salir un Gobierno. Y tiene que salir. Y por eso tiene que acabar pasando».

En Ciudadanos esperan que esa fórmula para poder incorporar al PSOE termine de definirse, ya que lo que no van a aceptar en ningún caso es un acuerdo paralelo con el PP que luego pueda ser derivado a los nacionalistas del PNV, a los que suponen con altas pretensiones en materia de autogobierno que son incompatibles con su filosofía. «Sabemos de donde venimos», señala Miguel Gutiérrez.

Ciudadanos ya ha movido sus fichas, hasta el punto de que algunos han afeado a Rivera su iniciativa que, claramente, no le corresponde en función de su representación. Y en la dirección asumirán a partir de ahora, una vez planteado su esquema, perfil más bajo: «No queremos más protagonismo del que aritméticamente nos corresponde» señaló ayer Girauta.

Estos planteamientos de Ciudadanos contrastan con el silencio que mantiene el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que lleva sin realizar ninguna intervención pública desde la noche del domingo. Sin embargo, no parece probable que Sánchez esté imaginando una alternativa de Gobierno progresista junto a Podemos, ya que según aseguran desde la formación morada, ayer el líder socialista ni siquiera había respondido al mensaje que Pablo Iglesias le mandó en la noche electoral.

En el PSOE tratan de que fructifique el pacto por el lado derecho de la cámara, incluyendo la concurrencia de PNV y Coalición Canaria, para evitar tener que «facilitar», como lo definió el líder extremeño, Guillermo Fernández Vara, la investidura de Rajoy. Pero ese es el camino que Rivera pretende cerrar,

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