Grupo de manatíes. junto a los dugongos, son los únicos representantes vivos del grupo de las «vacas marinas»
Grupo de manatíes. junto a los dugongos, son los únicos representantes vivos del grupo de las «vacas marinas» - ABC

Descubren una especie de sirenio cerca de Barcelona

Se trata de un «nuevo» mamífero marino del grupo de las «vacas marinas», al que pertenecen los manatíes y los dugongos actuales, que vivió hace 40 millones de años

MADRID Actualizado: Guardar
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Paleontólogos catalanes han descrito una nueva especie de sirenio que vivió hace 40 millones de años, a partir del análisis de unos unos restos hallados cerca de Tona (Barcelona). Este grupo de animales, también conocidos como «vacas marinas», hoy en día están representados por manatíes y dugongos.

El hallazgo, que ha sido publicado en la revista especializada «Comptes Rendus Palevol», ha sido realizado por Jordi Balaguer, colaborador del Instituto Catalán de Paleontología Miquel Crusfont (ICP). Gracias a su trabajo, se ha podido describir una nueva especie, bautizada como «Prototherium ausetanum», a partir del análisis de restos fósiles que incluyen partes del cráneo, vértebras y costillas de este animal.

«El estudio del cráneo reveló diferencias significativas respecto a las otras especies fósiles de sirenio que conocíamos del Eoceno medio», ha explicado Balaguer.

En la actualidad, este grupo de animales está representado solo por dugongos y manatíes, pero el registro fósil revela que en el pasado estos animales eran diversos y abundantes, sobre todo a mediados del Eoceno, hace unos 50 millones de años. Otra especie que representaba a este animal, «Hydrodamalis gigas», se extinguió en el siglo XVIII a causa de la caza indiscriminada.

A partir del análisis de restos recuperados en el yacimiento de Mas Vilageliu, a unos 2 kilómetros del municipio de Tona, los investigadores han podido descubrir otra de las especies de «vacas marinas». Para reflejar el lugar donde se ha hecho el hallazgo, los investigadores han incluido en el nombre de la especie el epíteto «ausetanum», en honor a los ausetanos, antiguo pueblo íbero de la región.

Se cree durante el Eoceno, y en la región catalana donde se ha hecho el hallazgo, había un mar tropical con arrecifes de coral donde habitaban sirenios, cetáceos, peces y una gran diversidad de invertebrados.

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