Cádiz - Elche
Cádiz - Elche (Previa) La banda quiere rematar en casa
El Cádiz despide la Liga en Carranza ante un Elche que viene jugándose la misma vida que ya le quitó otra veces
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Las vacaciones ya están ahí. Y se nota. Pero no por ello este Cádiz va a salir en chanclas por mucho que este domingo juegue en su casa ante un Elche que viene, como ya vino hace dos semanas el Huesca, a jugarse la vida. De competir nadie le va a dar una lección a este once de Cervera que se encuentra en plena batalla contra la historia. La mejor clasificación liguera de su vida fue en el 87/88, el 12 con Espárrago y aunque a Cervera le importe un bledo ese prurito para sacar más brillo aún a su nombre, lo suyo ya es coronarse con algo que realce más todavía su lustrado apellido.
Además de esa recordada clasificación del Cádiz de los Salazar, Mágico, Juan José y compañía, también está el tema de los billetitos, porque no es lo mismo quedar un puesto arriba que un puesto abajo . Las primas esperan y aunque ya están conseguidas por el objetivo más que logrado aún pueden llegar más regalitos a la saca de un vestuario que lo tiene de sobra merecido tras garantizar un año más en la élite.
La guerra ya terminó hace dos jornadas y buena parte delas huestes de Cervera ya descansan o se recuperan para la próxima empresa, la 21/22. Álex Fernández fue el primero en tener que retirarse cuando aún se conseguía el objetivo en el frente. Unas molestias en su rodilla le provocaron un anticipado adiós tras un año sufriendo el cambio de posición por el bien del equilibrio y de su equipo. Más tarde, ya con el éxito logrado, Cala levantaba la.misma mano que ya levantó en enero para decir que sí, que ahora sí se iba ya para el quirófano después de jugar infiltrado muchas jornadas con tal de arrimar el hombro. El sevillano ya se ha operado dela rodilla y se recupera en su casa con vistas a la próxima temporada. Los últimos en entrar en el hospital de campaña han sido Salvi y Akapo , dos hombres de club que han protagonizado un ejercicio tan decente como eficiente.
Sin estos guerreros, el Cádiz afronta los dos últimos duelos con más hombres en la reserva. Pueden ser los casos de los Pacha Espino, Jonsson, José Mari o Negredo, que llegan a este final de Liga con la moral tan tranquila como orgullosa por la labor realizada. Sumarán más minutos sin duda, pero lo harán como el veterano que acude a una batalla auxiliado por los más nóveles y motivados.
Así las cosas, el Cádiz volverá a presentarse con la misma dignidad que ante Huesca u Osasuna. O lo que es lo mismo, con la.misma vergüenza que ha estado demostrando durante un año donde se ha dejado la piel en el campo y la cabeza en la pizarra.
También va en el Cádiz el deber de ser un buen profesional. Ese mismo que no le importó no estar jugándose nada ante un Huesca moribundo para darle muerte. Y con esa mentalidad sedienta de triunfo ha de salir ante un Elche que también llega camino del abismo. Ya mandó hace unos años al once franjiverde al infierno de la Segunda B (liberando así a Álex, al que Cordero ficharía) y el destino ha querido que pueda enviarlo ahora a Segunda. Y es que al Cádiz por algo no se le tiene mucho cariño en la ciudad ilicitana, esa que convirtió en un funeral el año en que los de Milosevic subieron a Primera en la 80/81.
Con ese deseo agridulce, el de dar el estocazo a un colega, saldrá hoy un Cádiz en el que se seguirán viendo caras menos habituales comenzando por la portería, donde David Gil volverá a ser el guardameta para descanso de Ledesma,que ya sueña con los Juegos de Tokyo. La defensa será para Iza, al que se le complica el descanso debido a la lesión de Akapo en El Sadar. El portuense ejercerá de lateral derecho mientras que en la izquierda estará Espino, que seguirá para bingo dado que Cervera no ha terminado de ver a Jairo como lateral ni a Marc Baro para el primer equipo. Alcalá, pese a Alcalá, volverá al centro de la defensa junto al titán Fali.
Garrido debe repetir en el centro del campo junto José Mari, que con eso de que se perdió mucha Liga por dos lesiones ha llegado con gasolina de sobra al final de Liga. En las bandas, otra vez Alejo debe jugar por la derecha mientras que Jairo saldrá por la izquierda dejando el ataque para el Choco Lozano y Saponjic.
El Cádiz se despide hoy de una Liga en casa tan alegre como triste. Qué coño. Triste, muy triste. El silencio sepulcral que ha inundado el estadio gaditano difícilmente se podrá olvidar. Eso sí, cada vez que se recuerde se hará con una sonrisa por ser este el año en el que el conjunto gaditano regresó a Primera por la puerta grande. Y qué menos que despedirlo con una victoria aunque sea para maquillar la derrota que se sufrió en el primer revés que daba una categoría donde se pensó que se sufriría para terminar soñando.
