Motivación
Cómo iniciarte en el running sin morir en el intento
Dedicar unos minutos a hacer deporte, en este caso a correr, es sinónimo de relajación
¿Cuántas veces corres por semana? Salir a correr para reflexionar es la mejor forma de dejar salir los malos pensamientos y el estrés : ponerse música y recorrer las calles de la ciudad o los caminos más atractivos para que el trayecto se haga más ameno. Dedicar unos minutos a hacer deporte , en este caso a hacer running, es sinónimo de relajación, y no importa cuándo decidas hacerlo (antes de ir al trabajo te carga de energía mientras que después de una jornada laboral te aporta tranquilidad ) cualquier momento que establezcas será bueno para ponerte nuevas metas y cumplir objetivos.
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«La creatividad se intensifica por el oxígeno adicional en el cuerpo. Además, hacer running es excelente para tener ideas nuevas o encontrar soluciones a los problemas», explica el Dr. Thomas Falda-Buscaiot . Es fundamental que cada persona descubra su mejor momento del día para hacer deporte y tengan fuerza de voluntad y ser constantes para mantenerse activos y estar saludables. Desde la marca alemana de estilo de vida y deporte Freeletics proponen seguir estos consejos de motivación para disfrutar del deporte y, sobre todo, del running .
¿Por qué debes de escribir tus objetivos?
No es que se te vayan a olvidar, pero recogerlos todo en una pequeña nota significa que tarde o temprano irás tachando, mentalmente y literalmente, de esa lista todo lo que vas consiguiendo. No importa si los objetivos son grandes o pequeños, lo importante es que sean realistas, específicos y que se puedan conseguir a corto o largo plazo. Cuando se escriben es más sencillo recordarlos. Colócalos en algún lugar donde puedas visualizarlos diariamente: un tablón, en la puerta de la nevera, una pizarra...
Programa tu entrenamiento y establece alarmas de motivación
Planea cada día, cada semana y cada entrenamiento. Si la constancia no es tu fuerte, tira de agenda y planea un calendario a cumplir a rajatabla. Si el problema es que necesitas acompañante, reúne a varios amigos dispuestos a ponerse objetivos: de esta forma es menos probable que olvides el entrenamiento o dejes plantado a tu compañero. «Si decides establecer alarmas o recordatorios en el teléfono, intenta escribir mensajes de motivación que animará tu yo futuro a levantarse y salir a correr con un plus de ánimo», explica el Dr. Thomas Falda-Buscaiot.
Ve a dar un paseo
¿Dudas? Tómate un tiempo para decidir si es realmente lo que quieres hacer. Si aún no tienes claro si quieres iniciarte en el running, empieza con algo sencillo: da un paseo. Ponte la ropa de correr y camina solo 15 minutos . En cuanto estés fuera, hay más posibilidades de que termines corriendo o caminando a ritmo más rápido que si no sales de casa y no lo intentas.
Ponte la ropa de running
¿Sabías que es más probable que te motives si estás vestido para la ocasión que si no lo estás? Ponerte la ropa de deporte te anima a salir. Si quieres ir a correr por la mañana, deja la ropa al lado de la cama y coloca las zapatillas de correr en frente de la puerta de la habitación, para que sea lo primero que visualices si quiers salir de tu dormitorio y romperás cualquier pensamiento de renuncia. Si ves todo el equipo preparado, las posibilidades de que salgas a correr son mucho más altas que si tienes que prepararlo en ese instante. Si prefieres la tarde para correr, cámbiate en el momento que llegues a casa y deja las tareas para después de salir a correr.
Escucha una playlist que te motive
La música es la fiel compañera del deportista. Hoy en día no se concibe ir al gimnasio o salir a correr sin escuchar música. Puedes empezar con una playlist corta para hacer «workouts» específicos. Poco a poco ve creando una lista más larga. Debe ser tu motivación para salir y siempre escuchar las canciones que más te animan, tus favoritas y las que te traigan buenos recuerdos.
Menos es más
No es factible ponerte a correr largas distancias desde el primer momento. Si te propones correr largas distancias en la fase inicial, al final acabarás agotado y sin ganas de seguir corriendo. Lo ideal es realizar carreras cortas y rápidas que te vayan animando a ampliar los tiempos y la intensidad de forma progresiva. Los «workouts» perfectos son aquellos en los que corres durante un corto periodo de tiempo, pero quemas tantas, o normalmente más, calorías que en carreras de larga distancia. Al ver tu progreso y cómo vas aumentando, será la motivación ideal para que des el máximo en todo momento.
¿Qué tal una recompensación?
Todos necesitamos un chute de motivación, y saber que hay «premio» después de conseguir un objetivo marcado nos lleva a ponerle más ganas: es más fácil cuando hay una recompensa u objetivo final. Por lo tanto, haz un listado de posibles premios como un día de relajación en casa, alguna película del cine que te llame la atención, un dulce sano o alguna escapada especial.
Recuerda dónde y por qué empezaste
Prepara un diario de progresos. Es importante documentar desde el primer día tus logros y avances. Toma nota de lo que no te hace feliz, lo que quieres cambiar, tu peso, tus medidas, tus sensaciones. Y, siempre que pienses que tu entrenamiento se está haciendo muy duro, o te preguntes por qué te estás esforzando tanto, lee lo que escribiste al principio y hacia dónde quieres llegar.
Disfruta de tus carreras
No permitas que tus carreras se hagan aburridas. En cuanto veas que tu entrenamiento es más una tarea que una diversión, estás probablemente a punto de abandonar. Intenta llevar a cabo nuestros consejos para que disfrutes más del running. Lo importante es mantener la mente motivada.
Comprométete contigo mismo
Si piensas que realmente no te apetece salir a correr, comprométete contigo mismo y piensa que solo serán diez minutos, una carrera tranquila sin sobreesfuerzos. En la mayoría de los casos, acabarás corriendo más distancia en cuanto estés fuera. Y si realmente hoy no es el día, puedes volver a casa después de 10 minutos e intentarlo otro día. De cualquier modo, será mejor que no hacer nada.
