Adelgazar
¿Qué es la dieta DASH y por qué puede ayudar a perder peso?
La dieta DASH, que originariamente fue creada para reducir la hipertensión puede ayudar a bajar de peso de manera saludable
La dieta DASH tiene como objetivo ayudar a regular la hipertensión (sus siglas corresponden a los términos «Enfoques dietéticos para detener la hipertensión») y fue creada en los años 90 por el Instituto de Salud estadounidense. Pero lo cierto es que ua de las características de esta dieta es que, al ser un patrón de dieta saludable, no solo vale para tratar la hipertensión, sino que también puede ser útil para adelgazar , sobre todo en el caso de aquellas personas con malos hábitos alimenticios, pues un cambio como el planteado por la dieta DASH permitiría reducir la ingesta de calorías y adecuarla a sus necesidades. «Siempre que se realiza una restricción calórica se pierde peso. El reto es hacerlo de una forma equilibrada y sostenible a largo plazo, y estas dos condiciones se pueden cumplir con la dieta DASH», apunta la doctora María Ballesteros, coordinadora del grupo de Nutrición de la SEEN (Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición).
Lo que intenta esta dieta es, según explica la experta, intentar conseguir la disminución del sodio en la alimentación y, por otro lado, en aumentar el contenido en potasio, calcio y magnesio , que son los minerales que potencialmente consiguen mejorar la hipertensión. Así, la Dra. Ballesteros explica que la dieta DASH hace hincapie en los alimentos ricos en calcio, potasio, magnesio y fibra que, al combinarse, ayudan a disminuir la presión arterial.
¿Y qué debes comer si sigues esta dieta? La doctora lo explica. En primer lugar, es esencial reducir el consumo de productos procesados , así como incluir las frutas y verduras en nuestro menú. También, es esencial que los cereales que tomemos sean integrales , y que incluyamos en nuestra dieta una pequeña cantidad de frutos secos, así como pescados y carnes bajas en grasa.
Qué comer si se quiere hacer la dieta DASH
Hablando de las frutas, la doctora Ballesteros recomienda tomar al menos tres piezas de fruta , mejor enteras, al día, así como dos o tres lácteos desnatados. Llevándolo a la práctica, podemos tomar de postre en la comida y la cena una fruta de unos 150 gramos.
Asimismo, debemos controlar la cantidad de sal para cocinar (menos de 3 g/día): una cucharadita rasa de té), y para compensar podemos emplear condimentos habituales para cocinar y dar más sabor a las comidas (pimienta, pimentón, azafrán, vinagre, limón, ajo, cebolla…) y hierbas aromáticas (perejil, tomillo, hinojo, laurel, orégano…).
Al usar conservas de pescados para las ensaladas o para otros platos, se usarán preferiblemente las naturales (0% sal), pero con moderación. También, Se evitará añadir cubitos o pastillas de caldo de carne o pescado a las comidas.
Se usarán técnicas culinarias sin grasa : plancha, asado, horno, microondas, vapor, papillote... y se evitarán las frituras, los empanados y los rebozados.
Es aconsejable beber de 1,5 o 2 Litros de agua al día (8 vasos/día). En esta cantidad contarían las infusiones y caldos. Por otro lado, no se consumirán bebidas carbonatadas y estimulantes y
En cuanto al consumo de carnes, se aconseja un consumo frecuente de pescado, consumo de carnes magras (preferentemente de ave) y un consumo limitado de carnes rojas (1 o 2 veces a la semana).
Por último, se recomienda añadir 30 gramos de pan integral sin sal en la comida y en la cena.
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