JUAN CARLOS SOLER
El Astrolabio

El suicidio demográfico

Sin población que contribuya no habrá Estado del bienestar, ni progreso económico ni éxito frente a otros muchos retos que el futuro nos planteará

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Quienes poblamos estos días España, no sé si llegaremos a convertirnos en unos buenos antepasados. De continuar con tan bajas tasas de natalidad, el suicidio demográfico español está asegurado. Es la peor noticia que podemos dar de cara al futuro, tanto social como económicamente. El Papa Francisco nos alertaba ayer acerca del mundo que queremos dejar a nuestros descendientes, pero en España, además del clima, tenemos un serio problema de relevo generacional. No nacen niños. Cada día somos menos españoles. Eso va directamente contra la línea de flotación del sistema de las pensiones, de la economía y, en definitiva, del futuro. Es curioso que esta cuestión no sea abordada estos días por ninguno de los candidatos que aspiran a gobernar, y con toda seguridad es uno de los tres asuntos más serios que tiene planteado nuestro país.

Sin población que contribuya no habrá Estado del bienestar, ni progreso económico ni éxito frente a otros muchos retos que el futuro nos planteará. Seremos poquita cosa. Lo inquietante es que en las entrañas de esta cuestión habita egoísmo destructivo y suicida.

Ver los comentarios