Planes para celebrar San Valentín en Madrid

La Venus de Madrid y el mito del amor

Hay tantos «Madrid» dentro del propio Madrid como rincones por redescubrir. El Museo del Prado es uno de ellos. El protagonismo del amor, expresado en los múltiples formatos de sus salas, sigue sorprendiendo a los visitantes. Vivirlo en pareja puede ser un plan alternativo a los tópicos de una cita explotada comercialmente hasta la saciedad. En su versión más romántica, la pinacoteca guarda la desconocida «Venus de Madrid» -a la izquierda-, una escultura dedicada a la diosa romana del amor de la colección real de Cristina de Suecia. Este puede ser el inicio de un recorrido por otras obras como el «El jardín del Amor», de Rubens; «Venus, Adonis y Cupido», de Carracci; o «La bacanal de los Andrios», de Tiziano.

Palacio de Cibeles, la ciudad a tus pies

Puede que el invierno condicione muchos lugares propicios al amor -«quicios de puertas orientadas al norte, orillas de los ríos, bancos públicos», dejó escrito el poeta Ángel González en su «Inventario»-, pero Madrid tiene exteriores que enamoran. Algunos de ellos pasan inadvertidos en el día a día. Romper la rutina permite descubrir sitios como el Palacio de Cibeles. Sus miradores rinden la ciudad a los pies de sus visitantes. Además de las vistas, en su terraza bar se puede disfrutar, por ejemplo, de un dulce chocolate para combatir el temido frío.

Un paseo en las alturas

El Teleférico de Madrid es uno de los sitios más visitados durante el año por parejas de enamorados que quieren compartir un viaje romántico, celebrar aniversarios o hacer pedida de manos. Con motivo de la llegada de San Valentín, propone una oferta especial, una experiencia original y divertida para vivirla con la persona que más quieres.

El viaje en el Teleférico permite disfrutar de un romántico viaje bajo el cielo de Madrid, sobrevolar la ciudad en un medio de transporte ecológico, adentrarse en la Casa de Campo tocando las copas de los árboles hasta llegar a la Cafetería Mirador del Teleférico, y allí brindar con cava y endulzar el momento con profiteroles de chocolate, mientras se contemplan las mejores vistas panorámicas de Madrid.

Viaje de ida y vuelta, una botella de cava y profiteroles de chocolate para cada persona. Precio: 12,90 euros por persona. Oferta valida los días de apertura del Teleférico durante el mes de febrero. Sábados, domingos y el viernes 17 de febrero, desde las 11:00 hasta las 18:00 horas.

El último jardín romántico de Madrid

Cercado tras una discreta tapia, rodeado del viejo Madrid de los Austrias, se esconde el último jardín romántico de la capital: el del Palacio de Anglona. Un lugar poco transitado en el que se respira la intimidad necesaria para una cita especial. Es una de las joyas que el paisajista Javier de Winthuysen -pintor y diseñador de los jardines de La Moncloa o del Palmeral de Elche- legó a la capital en 1920. Un rincón con mucho encanto en el que dejarse caer de forma casual... o no. Su acceso, a través de una pequeña puerta, es libre.

No dejes escapar este tren

Si hay un lugar de la capital ligado al cine es la vieja estación de trenes de Delicias, sede del Museo del Ferrocarril. En sus andenes, donde descansan joyas ferroviarias, se han rodado escenas de una treintena de películas, la mayoría de amor. Entre los clásicos que se grabaron en este histórico lugar están « Doctor Zhivago» (1965) o «Las cosas del querer» (1989). Puedes completar la visita reservando mesa para comer en un vagón de los años 20, fabricado por la misma casa que creó el famoso Orient Express.

Regala un momento de película

Si lo que estás pensando es en sorprender a tu pareja aquí tienes un lugar que no es lo que parece: Diurno. Lo evidente es esperar una romántica y tópica comida en un local de moda. Sin embargo, este restaurante de Chueca permite alquilar «un momento de película» gracias a su videoclub y su servicio de «take away» -solo de lunes a viernes, a mediodía-. Alquila una película para verla juntos en casa mientras disfrutáis de vuestro plato favorito.

Amanece enamorado

Se acerca el día más romántico del año y hay quienes prefieren vivirlo al máximo, desde primera hora. Para eso, existen planes que permiten amanecer el 14 de febrero, día de San Valentín, con un desayuno servido en la habitación –o en el comedor al estilo buffet– después de haber pasado la noche en el Hotel Orfila de Madrid. Este establecimiento con encanto de la capital, extenderá esta experiencia –habitación superior con vistas al jardín, bañera de hidromasaje, velas perfumadas, botella de champagne y chocolate de bienvenida y cena para dos personas con o sin maridaje– hasta el domingo 19 de febrero (440 euros). También existe la posibilidad de reservar solo la cena romántica –un exclusivo menú diseñado por el chef Mario Sandoval, galardonado con 2 estrellas Michelin– (160 euros, dos personas o 120 euros, sin maridaje).