El alto el fuego en Siria se tambalea

Peligra el alto el fuego en Siria. Diversos grupos de la oposición han denunciado reiteradas violaciones de la tregua por parte de el Ejército regular del presidente Bachar el Assad, lo que ha motivado la convocatoria de una reunión urgente esta tarde del Grupo Internacional de Apoyo a Siria, formado por los países que buscan una solución diplomática al conflicto.

Ha sido Francia la que ha reclamado información al respecto. «Hemos recibido informes de que los ataques, incluidos los aéreos, han continuado contra zonas bajo control de la oposición moderada y todo esto ha de ser verificado», ha dicho Jean-Marc Ayrault, ministro de Exteriores francés. Ayrault ha señalado que esas noticias requieren que el Grupo de Apoyo, liderado por Estados Unidos y Rusia y encargado de la supervisión del cese de las hostilidades, se reúna «sin demora».

En la misma línea, un portavoz del Alto Comité para las Negociaciones, que representa a la denominada oposición moderada en las negociaciones de Ginebra y cuenta con el respaldo de Arabia Saudí, ha afirmado que las fuerzas del Gobierno han roto la tregua quince veces y que Rusia y la milicia libanesa de Hizbolá, aliadas del régimen, tampoco lo están respetando.

Inicio de la ayuda

Estas inquietantes noticias llegan en el momento en que la ONU se dispone a iniciar la entrega de ayuda humanitaria a la población de las áreas asediadas de Siria, después de la entrada en vigor el pasado sábado del alto el fuego impulsado por Estados Unidos y Rusia.

Se espera que durante los próximos cinco días la ayuda alcance a 150.000 personas que viven en áreas cercadas. El objetivo es el de haber auxiliado a 1.700.000 personas antes de que termine marzo.

Los informes que llegan sobre la situación sobre el terreno hablan de una cierta mejora. Según informó la agencia AFP, los niños de Alepo, una de las ciudades más castigadas por los combates, pudieron hoy ir a la escuela sin tener que caminar constantemente parapetados junto a los muros. Por primera vez en meses, los niños han podido salir a jugar al patio en el tiempo de recreo.

El alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeis Raad al Hussein, explicó que en torno a 450.000 personas residen en poblaciones asediadas en Siria y que muchas de ellas «corren riesgo de morir de hambre». El plan de Naciones Unidas prevé iniciar la entrega de comida, agua potable y medicinas en seis ciudades sirias esta misma semana. El primer cargamento debería estar destinado a Muadhamiya, bastión en manos de los rebeldes situado al sudoeste de Damasco. El miércoles llegaría el turno de Madaya y otras tres localidades. La ONU espera el consentimiento de las partes beligerantes para poder ampliar el operativo previsto.