Desigual vuelve a abrir la pasarela Mercedes-Benz Fashion Week

Ser el encargado de abrir una nueva edición de la prestigiosa pasarela Mercedes-Benz Fashion Week Madrid es todo un reto que, por segunda vez, asume la firma catalana Desigual.

El pasado mes de septiembre la marca hizo desfilar a una espectacular Alessandra Ambrossio, que fue la encargada de liderar una sucesión de sonrisas, flores, besos y, en defintiva, de transmitir buenas sensaciones. Las mismas que Desigual quiere que sienta todo aquel lleve sus prendas y con las que viste este viernes en Madrid a Chantelle Winnie, modelo que ha puesto de manifiesto hasta qué punto la moda cambia, reinventándose y haciéndose más accesible y próxima a un mundo real.

Winnie Harlow -su verdadero nombre- es la primera modelo que padece vitíligo.

Pese a las manchas en su cuerpo –simétricas en la cara–, esta joven estudiante de periodismo y amante de los viajes ha conseguido realizar su sueño: caminar sobre la pasarela y será todo un lujo verla este viernes en el escenario treinteañero madrileño.

Esta temporada Desigual presenta una colección para «el nómada que todos llevamos dentro». Lo que la firma ha querido plasmar es esa parte de nosotros que nos incita a movernos, reciclarnos, innovar, descubrir, mezclar y exigir a la vida constantemente más. Para ello, ha explorado nuevas formas de trabajo y materiales, a través de una ecléctica y multicultural propuesta en tonos tierra, verdes, malvas y burdeos, donde se entrelazan influencias de aquí, de allí...

Así, sobre la pasarela el viernes 6 de febrero veremos denims camaleónicos, peluches con reminiscencias casi primitivas, híbridos de espíritu «mottainai» o hasta experimentales acolchados, que se entrelazan dibujando un nuevo estilo de vida que nos empuja a reinventarnos en un mundo sin verdades inmutables donde todo cambia.