Aguirre dice que «hay que pedirle a la Virgen que Trump sea un buen presidente»

La capital española ha renovado hoy el tradicional voto de la Villa con su patrona, la Virgen de la Almudena, de la mano de la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, quien ha asegurado que «es de justicia» ayudar a los «refugiados y a los inmigrantes sin papeles y sin asistencia sanitaria». Este es el segundo año que Manuela Carmena, como alcaldesa, renueva los votos de la ciudad de Madrid con su patrona y este año al igual que el pasado ha dirigido la mirada hacia los más necesitados.

La alcaldesa, «no creyente», se ha mantenido en su actitud institucional y ha cumplido la tradición que se repite año tras año por los alcaldes de la capital frente a la figura de la Almudena, virgen que, según la cultura popular, salvó a Madrid de unas graves inundaciones en 1646.

En su discurso durante la celebración, Manuela Carmena ha destacado que es «un honor renovar un año más» los votos en esta liturgia y ha ensalzado la figura del Papa Francisco, quien -ha considerado- también habría apoyado y luchado por los refugiados.

Esta celebración, que ha coincidido este año con la elección del magnate Donald Trump como nuevo presidente de los Estados Unidos, ha unido a representantes políticos de todos los signos, como Esperanza Aguirre (PP), Purificación Causapié (PSOE) o Begoña Villacís (Ciudadanos), quienes han coincidido en que esperan que se sigan manteniendo relaciones «amistosas» con Estados Unidos.

La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid, Esperanza Aguirre, ha declarado este miércoles minutos antes de que comenzara la misa por la Almudena en la Plaza Mayor que «hay que confiar y pedirle a la Virgen que Donald Trump sea un buen presidente para los americanos y para todos los demás».

«Es lo que ha querido el pueblo norteamericano. La democracia es el sistema que permite cambiar de gobierno de manera pacífica y hay que confiar y pedirle a la virgen que sea un buen presidente para los americanos y para todos los demás», ha señalado a la prensa.

Aguirre ha añadido que la misa en homenaje a la patrona de Madrid en la Plaza Mayor «es lo que tiene que unir a creyentes y a los no creyentes». A los primeros les sirve de ocasión para pedirle que traiga a madrileños y españoles «trabajo, prosperidad, bienestar y mayor libertad de la que ya se tiene en España».

El sol y el frío han acompañado a las más de 5.000 personas, según la organización de la Archidiócesis de Madrid, que han asistido a esta ceremonia en la plaza Mayor de la capital y que ha estado guiada por el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro.