El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el ministro Íñigo de la Senra durante su reunión
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el ministro Íñigo de la Senra durante su reunión - EFE
Reunión de Feijóo en Madrid con Íñigo de la Senra

Fomento aplica al AVE gallego el año de retraso del gobierno en funciones

El ministro fija para el tercer trimestre de 2019 la culminación de la conexión de Alta Velocidad entre Galicia y Madrid

Santiago Actualizado: Guardar
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La conexión de Galicia con la Meseta tendrá que esperar casi un año más de lo inicialmente previsto. El ministro de Fomento trasladó ayer en Madrid al presidente de la Xunta la nueva fecha para la llegada de la Alta Velocidad a la Comunidad gallega: el tercer trimestre de 2019. Unos «ocho o nueve meses» más que la fecha comprometida por Mariano Rajoy al inicio de su primera legislatura al frente del Gobierno de España y que, sumados a los meses de prueba a los que tendrá que someterse la infraestructura, se corresponden con el tiempo que el Ejecutivo permaneció en funciones a causa del bloqueo político. Una situación de interinidad que hizo que se congelasen las negociaciones con las empresas adjudicatarias de hasta cinco tramos con especiales dificultades y que ahora provocan el retraso en la fecha definitiva.

«Feijóo tiene que exigir que las obras se completen de inmediato y en un plazo razonable»
Luís Villares (En Marea)

Después del encuentro que se prolongó por más de dos horas, de la Serna actualizó las fechas para la puesta en marcha de esos tramos problemáticos. El primero de ellos, el que une Zamora con la localidad de Pedralba, es el que presenta un estado de ejecución de las obras «más avanzado», por lo que Fomento prevé que esté «completamente finalizado» a finales de 2018, acortando en casi media hora el trayecto entre Galicia y Madrid. Más preocupantes son los otros cuatro trechos, entre los que se incluye el enlace Taboadela-Orense –sin línea de AVE de momento– y que no estarán listos hasta el tercer trimestre de 2019 tras un «esfuerzo importantísimo» del Gobierno central por acortar los plazos. Como muestra del compromiso de su departamento con esta infraestructura, el propio Íñigo de la Serna acudirá en persona a Galicia cada tres meses para vigilar el avance de las obras y comprobar de primera mano que se cumplen las fechas establecidas ayer por el Gobierno central.

«La idea de que el año de gobierno en funciones retrasó las obras es falsa y la desmienten las empresas»
Xoaquín Fernández Leiceaga (PSdeG)

En cuanto a la construcción de las estaciones intermodales en Vigo, Orense, La Coruña y Santiago, tanto el titular de Fomento como Alberto Núñez Feijóo anunciaron que a partir de este mes empezarán a reunirse las correspondientes comisiones de seguimiento para la ejecución de estas infraestructuras, empezando por la de la capital gallega. El presidente de la Xunta se comprometió a agilizar los trámites lo máximo posible para que las obras estén terminadas coincidiendo con la llegada del AVE a Galicia. Para ello, el Gobierno gallego echará mano de la ley exprés aprobada en el Parlamento autonómico para reducir unos tiempos de licitación que de otra manera podrían prolongarse «durante años». Núñez Feijóo también quiso referirse a la ciudad de Lugo, la única que no tiene proyectada la construcción de una estación intermodal para concluir que «merece tener también una conexión con la Meseta». El presidente de la Xunta valoró positivamente el encuentro con el titular de Fomento y señaló que los compromisos adquiridos demuestran que «para el Gobierno central la llegada del AVE a Galicia es un asunto prioritario».

Comisión de la AP-9

«No nos valen las excusas de Feijóo. El Estado tenía unos presupuestos aprobados que no se ejecutaron»
Ana Pontón (BNG)

Tras el encuentro mantenido ayer en Madrid, De la Serna puso fecha a la constitución de la comisión bilateral entre Fomento y la Xunta para analizar la gestión conjunta de la AP-9 y que se celebrará antes del 15 de febrero. El ministro ratificó, además, ante Feijóo el compromiso del Gobierno central de costear la totalidad de los peajes de la AP-9 entre Rande y A Barcala, que desde 2006 pagaban a partes iguales Ministerio y la Xunta. Una actuación que supondrá un ahorro para las arcas gallegas de unos seis millones de euros anuales.

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